La Semana de la Moda de París (Paris Fashion Week) pone punto y final a la temporada de presentación de las colecciones para los próximos otoño e invierno, tras los desfiles de Nueva York, Londres y Milán.
Chanel convirtió el Gran Palais en un súper mercado, con la ironía de que todos sus productos estaban personalizados o “chanelizados”, es decir: el aceite de oliva se llamaba La Gabrielle y los cereales eran Coco Flakes. Y así, un montón de elementos que en su origen son ordinarios, pero que en este desfile se elevaban a caprichos de coleccionista. No estaban a la venta y no podían salir del recinto, por lo que todavía eran más deseados. Su colección llamó la atención por no subir a las modelos en altísimos zapatos, sino por ponerles en zapatillas de deporte y por otorgarle un aire muy urbano en general a todas las prendas.
Otro asunto muy distinto fue el desfile de Elie Saab, con un derroche de elegancia difícil de igualar. El tono burdeos fue el protagonista de una colección inspirada en el pintor Mark Rothko y que se presentó en los Jardines de las Tullerías.
David Lynch fue quien inspiró a la firma Kenzo. Los diseñadores querían plasmar en sus prendas lo que el director de cine ve a través de sus ojos, basándose en la corriente surrealista por la que es conocido, con infografías de sus películas plasmadas en las creaciones.
Saint Laurent prosigue con sus colecciones juveniles, con un contraste radical por lo creado por Yves. A pesar de que Hedi Silmane, su rebelde director creativo, también está considerado un visionario, no deja de sorprender el giro tan audaz que le ha dado a la marca, con un prisma mucho más comercial que sus predecesores en la firma francesa.
Una de las sorpresas de la presentación de la colección de Lanvin fue la presencia de Rhianna. La combinación de la famosa cantante y el estilo creado por Albert Elbaz con vestidos-joyas en tonos negros consagró a este desfile como uno de los acontecimientos de la semana.
Colores pop, estampado arlequín y delicadas mariposas dibujadas en femeninos vestidos fueron las premisas de Maria Grazia Chuiri y Pierpaolo Piccioli para la nueva colección de Valentino. Asombra el lujo y riqueza de los tejidos con los que confeccionan sus prendas y el poco seguimiento a las tendencias marcadas por cada temporada. Es más, se podría decir que ellos son quienes las crean.
La nueva colección de Jean Paul Gaultier se mostró como una visión futurista de cómo serán las futuras tribus urbanas, redibujando el estilo punk y gótico. El diseñador utiliza materiales tecnológicos y sigue con su costumbre de hacer desfilar a personas de todas las edades y razas.
Sin duda lo más esperado de toda la Semana de la Moda de París ha sido el desfile de Louis Vuitton, el primero diseñado por Nicolas Ghesquière. Estas eran sus sinceras palabras impresas en una carta que recibía a todos los invitados de su esperado debut: “Hoy es un nuevo día. Un gran día. Estás a punto de presenciar mi primer desfile para Louis Vuitton. Las palabras no pueden expresar exactamente la emoción que siento ahora mismo… y sobre todo, la gran felicidad que me provoca estar aquí, siendo consciente de que mi expresión estética está en armonía con la filosofía de Louis Vuitton. El legado orgulloso. La inspiradora historia que mira al futuro y al mundo. La búsqueda de autenticidad e innovación. El deseo de la atemporalidad. ¿Acaso cualquier diseñador no busca como fin crear algo realmente atemporal? Desde aquí rindo homenaje al trabajo de Marc Jacobs, cuyo legado espero sinceramente honrar. Y os doy las gracias a todos vosotros por estar ahí y compartir este momento conmigo. Gracias a todos los que me habéis ayudado a escribir esta nueva historia y a hacer de Louis Vuitton lo que es, y gracias especialmente a todos los que han trabajado conmigo. Gracias a todos los que están aquí el día de hoy, en esta mañana. Ahora mismo”.
El desfile ha sido una consecución de conjuntos femeninos y siluetas en A, con vestidos y faldas combinadas con chaquetas bicolor, pantalones de cintura alta, jerséis de punto, estampados con influencias retro y botines en todos sus looks. Un comienzo humilde en su persona y glorioso en la pasarela. ■