Debido a los conflictos políticos en Venezuela, sus visitas a su tierra natal han disminuido con los años, y aunque todavía conserva fuertes lazos que la unen a su patria, es en Nueva York donde actualmente Maury se siente en casa. En esa vibrante ciudad comenzó a hacer amigos y se dio cuenta de que compartían algo en común: el compromiso, que despertó su innato espíritu filantrópico. “En Nueva York, todos están conectados a algo. Vi que mis amigos eran muy activos en las causas con las que estaban comprometidos”, explica Maury. “Me entusiasmó la idea de hacer algo por la comunidad latina”.
Desde el 2001, Maury se ha desempeñado como presidenta de la Junta de Directores de AID FOR AIDS International, una organización sin fines de lucro que, a través de la promoción, la educación y el asesoramiento, está comprometida con el apoyo y la ayuda a las comunidades en alto riesgo de contraer el VIH. La organización también trabaja con la población inmigrante en la ciudad de Nueva York y envía ayuda médica y humanitaria a 43 países.
Fue a través de su trabajo con AID FOR AIDS que Maury conoció a su esposo, William Haseltine, un biólogo reconocido por su trabajo en la investigación del VIH/sida durante la década de 1980. El ex profesor de la Universidad de Harvard fundó los departamentos de investigación sobre el cáncer y el VIH/sida en la Escuela de Medicina de Harvard. Hoy en día, Haseltine —a quien Maury considera su mentor y un apoyo increíble— está involucrado en una serie de proyectos filantrópicos junto a su esposa y ha creado dos fundaciones de caridad: The Foundation for Science and the Arts y ACCESS Health International. Maury y Haseltine se casaron en agosto del 2012 y tienen cinco hijos, fruto de matrimonios anteriores: Karina, Camila, Manuela, Mara y Alexander.
Otro gran propósito al que Maury se ha entregado con pasión es El Museo del Barrio, la importante institución cultural neoyorquina que fomenta en Estados Unidos el arte y la cultura latina, tanto del Caribe como de Latinoamérica. Junto con una amplia gama de colecciones y exposiciones de gran riqueza artística y cultural, El Museo ―ubicado en Manhattan― ofrece, además de sus exhibiciones, programas de cine y de artes literarias, visuales y escénicas, así como celebraciones y programas educativos.
Maury se involucró con El Museo del Barrio a través de dos grandes amigos: el artista Tony Bechara y la filántropa y mecenas de las artes Estrellita Brodsky. En la actualidad, es consejera y uno de los miembros más activos y comprometidos de la Junta Directiva del museo neoyorquino. Aunque AID FOR AIDS y el Museo del Barrio son dos organizaciones diferentes, Maury considera que ambas comparten aspectos comunes. “Hacen cosas maravillosas y muy diferentes pero, irónicamente, el mundo del arte es un sector que ha sido gravemente afectado por la epidemia del VIH”.
Este año, Maury y Haseltine presidirán la Gala 2015 de El Museo. El evento ―que se realizará el 14 de mayo― tendrá un tema cinematográfico inspirado en una exposición actual del museo: Under the Mexican Sky: Gabriel Figueroa-Art and Film (Bajo el cielo mexicano: Gabriel Figueroa-Arte y Cine), la muestra dedicada al director de fotografía mexicano Gabriel Figueroa, quien filmó más de 200 películas en 50 años. Aclamado cineasta, tanto en Estados Unidos como en México, Figueroa fue ganador de un Globo de Oro, recibió el American Society of Cinematographers International Award en 1995 y mereció múltiples premios Ariel. La exhibición también incluye pinturas de famosos artistas mexicanos de aquella época como Diego Rivera, Manuel Rodríguez Lozano y José Clemente Orozco. Para capturar la elegancia y el dramatismo de ésta, se ha pedido a las mujeres que vistan de blanco y negro y que usen guantes y velos.
Los homenajeados de este año, todos de ascendencia mexicana, son: Yolanda Santos, consejera del Museo del Barrio y cofundadora del Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey, en México; Lisa García Quiroz, quien supervisa las obras filantrópicas y la fundación benéfica de Time Warner, de la que es su vicepresidenta y directora de Diversidad; y Eugenio López Alonso, fundador y presidente de la Fundación Jumex, una de las mayores colecciones privadas de arte en las Américas. La velada tendrá lugar en el icónico hotel Plaza, en el centro de Manhattan, donde alrededor de 450 invitados podrán disfrutar de una noche maravillosa cuya recaudación se destinará a los programas educativos de El Museo.
Esta noche de fiesta será la oportunidad perfecta para que Maury demuestre su entusiasmo por El Museo del Barrio. “Es el museo latino más importante en los Estados Unidos. Es una necesidad tener este museo, que representa nuestro arte, nuestra cultura y nuestra gente”, concluye Maury. “El Museo me inspira y me encanta estar comprometida con él”. ■
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