Piaget, Baume & Mercier, MontBlanc, Van Cleef & Arpels, Cartier, Audemars Piguet, Officine Panerai, Vacheron Constantin y otras ocho casas de relojería de alta gama fueron las firmas seleccionadas para exponer sus valiosas y exclusivas piezas en el Salón International de la Haute Horlogerie que se realizó en Ginebra, Suiza, del 20 al 24 de enero del 2014. A este evento, uno de los más importantes del año para los principales fabricantes de relojería de lujo, concurren cada año unos 13.000 expertos y profesionales del ramo, ávidos de presenciar los nuevos modelos de las marcas más exclusivas del planeta y codearse con lo más elevado del mercado relojero internacional.
Este año, una las novedades más destacadas del Salón de Ginebra fue la presentación del Diver, de la línea deportiva Calibre de Cartier, un modelo de buceo certificado con la norma ISO 6425, que es el estándar necesario para relojes de buceo de alta profundidad.
El Diver, que se destaca en el segmento de productos masculinos, es el primer reloj de buceo de la tradicional maison. Muestra un diseño claramente deportivo, con números romanos fáciles de leer y grandes agujas con elementos refractarios. También cuenta con una resistencia al agua de hasta 300 metros de profundidad y es capaz de soportar altas presiones y bajísimas temperaturas. Para Cartier, que fue el mayor expositor en esta cumbre de relojería del 2014, su nueva pieza “es un compromiso entre las exigencias técnicas de un reloj de buceo y la estética propia de Cartier”.
Piaget, por su parte, dio su nota sobresaliente con la presentación del Altiplano 900P, el reloj mecánico más delgado del mundo, con un espesor de tan solo 3,65 milímetros. Las 145 delicadas piezas que componen el sofisticado mecanismo del nuevo modelo han sido minuciosamente trabajadas hasta lograr, en algunos casos, el grosor de un cabello.
El Altiplano 900P (así era el Altiplano Skeleton 2013) presenta un diseño minimalista, perfectamente redondo, con finísimas agujas negras y un segundero independiente, todo contenido en un cuerpo de oro blanco de 18 quilates sostenido por una elegante correa negra de piel de cocodrilo. Este modelo tendrá un precio de mercado que se estima entre los 20.000 y 30.000 dólares.
LeBron y Audemars Piguet.
Por otro lado, la tradicional casa suiza, Vacheron Constantin, fundada en 1755, presentó su nueva línea de relojes The Art of Openworking, compuestos por elegantes piezas que dejan ver los intrincados mecanismos de los relojes mecánicos, lo cual exige un trabajo artesanal de una precisión exquisita. Cada una de las piezas está delicadamente grabada a mano, lo que las convierte en piezas únicas e irrepetibles. Esta línea de Vacheron Constantin presenta soberbios relojes para ambos sexos, con una gran selección de colores.
La industria de la relojería de alta gama ha disfrutado en los últimos años de un crecimiento importante, ya que el mercado potencial que puede acceder a sus piezas de lujo las considera como elementos de colección que diversifican sus inversiones. Todos los ejemplares de una edición especial de Officine Panerai en oro blanco u oro rosado fueron vendidos el primer día. “Se trata de 100 piezas y todas se vendieron a un precio de 89.000 dólares la unidad”, señala un representante de la casa italiana de relojería, quien recordó que la marca se hizo célebre por sus relojes fabricados especialmente para los comandos de la Marina Real durante la Segunda Guerra Mundial.
Impulsado por este gran momento, el Salón Internacional de Alta Relojería de Ginebra ha sido la excusa perfecta para que las principales marcas del mundo demostraran todas sus capacidades sin escatimar en lujo, innovaciones y propuestas.
■