El Sublimotion está lleno de sorpresas. Entre otras fantasías, la cena se sirve en una mesa con efectos 3D mientras los platos reales aparecen levitando en el aire como si no hubiese gravedad. Por su parte, la música y la ambientación de la sala se adecuan a los ingredientes y la secuencia del menú.
Esta cena exclusiva se reduce a 12 comensales por turno reunidos en una sala, con reserva individual o de toda la mesa, aunque la propuesta en su totalidad consta de varios escenarios distribuidos en los 350 metros cuadrados que ocupa el restaurante. En ella participa un equipo de diseñadores, técnicos audiovisuales, escenógrafos, músicos e ilusionistas, junto con el personal de servicio. Sublimotion estará abierto cada noche, sólo hasta el 30 de septiembre del 2014, y el precio del cubierto es de alrededor de 2.200 dólares. Para no perder la emoción de la cena, el restaurante no revela que platos componen el menú, toda la cena se establece en diferentes secuencias o escenas que contienen uno o varios platos. Algunas de esas escenas son: Aceite de oliva virgen extra, Polo Norte, El mar en la boca, Versalles, e Infierno.
Los platos del menú se elaboran a partir de productos mediterráneos —como el aceite de oliva (ingrediente fetiche del chef)— con formatos como la paella junto al mar, el picnic campestre o una barbacoa entre amigos, a los que Roncero aporta su técnica y una imaginación sin límites. Bajo su batuta, un experto equipo de cocineros, maîtres, sommeliers y camareros garantiza que todo salga a la perfección.
Para Paco Roncero, ganador de dos estrellas Michelin con su restaurante Terraza del Casino de Madrid, este nuevo proyecto es un sueño largamente meditado y trabajado. “Estoy muy ilusionado y convencido de que quien nos visite, disfrutará una experiencia jamás vivida anteriormente”, aseguró el chef durante la presentación de su establecimiento, para el que ha escogido Ibiza “por ser uno de los destinos más internacionales del mundo”, con un público “cada vez más exigente y ávido de nuevas y evolucionadas propuestas gastronómicas”.
Chef Paco Roncero.
No es la primera vez que Roncero sorprende con una experiencia gastronómica arriesgada. El famoso chef inauguró en el 2012 su “taller de emociones” en el Casino de Madrid, un laboratorio de investigación que incluye tecnología de los sectores de la aeronáutica y el cine para crear una cocina de vanguardia. También es el impulsor de los “gastrobares” Estado Puro, que desde hace seis años proponen en Madrid un concepto renovado de las tapas españolas y que ahora también tienen una sucursal en Ibiza. ■