Una forma de entender la idiosincrasia de un país es conocer qué comen sus habitantes. Por eso, si quiere conocer mejor el Reino Unido, en su próxima visita a Londres, no debe perderse el Borough Market, uno de los más antiguos mercados de Europa aún en funcionamiento. El legendario mercado, que data del siglo XII, combina historia, tradición y, por supuesto, excelentes productos locales e internacionales.
Su historia realmente se remonta al siglo XI, época en la que los vendedores de grano, pescado, verduras y ganado que negociaban junto al Puente de Londres fueron trasladados a la calle Borough High. Luego, en 1755, el Parlamento decretó su cierre debido a los enormes atascos que se producían en la entrada del puente hasta que, finalmente, un grupo de comerciantes adquirió una parcela donde reabrió el mercado.
El Borough Market se encuentra en la zona de Southwark, entre las calles Southwark y Borough High, al sur de la Catedral Southwark y justo al lado de la estación del metro London Bridge. El edificio actual fue diseñado en 1851 y su emblemática entrada de estilo art déco se añadió posteriormente en 1932.
Un paraíso para los amantes de la gastronomía, el Borough Market encierra un gran número de puestos de comida de todas partes del mundo. Además, sus alrededores están plagados de tiendas, restaurantes y pubs —algunos decorados como hace siglos— donde se pueden probar, recién cocinados, muchos de los productos del propio mercado.
En este lugar mágico y bullicioso, los pollos, las coliflores, las ramas de vainilla, los salmones de Escocia y las cabezas de cerdo comparten el espacio con puestos donde se vende el mejor champagne francés o el más delicado caviar ruso. Por eso, el Borough Market es un lugar tan especial.
Lo mejor es dejarse llevar por los aromas, los sabores y los colores. Recorrer tranquilamente sus puestos, deleitarse con un roast beef con salsa de mostaza recién cocinado, probar las aceitunas españolas y griegas sazonadas y disfrutar los aromas del pan caliente acabado de hornear.
En el Borough Market no se puede perder su famosa paella y una milenaria torta de carne cuyos orígenes se remontan a la época en la que Londres formaba parte del Imperio romano. También son célebres los puestos de miel artesanal, los de pasta fresca, los de platos indios con sus diferentes y picantes curris, así como los de yogures biológicos, los de frutos secos y los de quesos típicos ingleses como el Cheddar o el Stilton. En las tiendas de vinos seguramente encontrará el que busca, y se asombrará con las que venden las típicas cervezas y sidras inglesas. ¡Una auténtica e inolvidable bacanal gastronómica! ■