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Desde lujosos hoteles en cuevas subterráneas de Suecia a otros montados en las copas de colosales árboles en la selva del Amazonas, te presentamos aquí los resorts más excéntricos del planeta que permiten a sus huéspedes conquistar la cima del mundo o explorar sus entrañas. ¡Acompáñanos en este fascinante recorrido!
Viviendo en los árboles
Si quieres viajar a Brasil y pasar unas vacaciones una manera muy diferente, sumergido en su exuberante naturaleza y alejado del ruido de la ciudad, tienes un refugio perfecto para aislarte en los majestuosos bosques amazónicos. Dotadas de una belleza inigualable, las copas de sus árboles se han convertido en el nido del Ariau Amazon Towers, uno de los hoteles de turismo ecológico de lujo más interesantes del mundo.
Este lugar permite a los viajeros observar muy de cerca el llamado “Encuentro de las aguas”, donde confluyen las aguas oscuras del río Negro con las más claras y arcillosas del río Solimões (como es llamado el río Amazonas en ese tramo). A lo largo de seis kilómetros, las aguas de los dos ríos corren lado a lado sin mezclarse. Un espectáculo de la naturaleza digno de contemplarse.
También se puede dar un paseo a pie por el bosque y volver al hotel para relajarse en los balcones de las habitaciones, rodeados de la vida silvestre de la región. De hecho, muchas mañanas los monos despiertan a los huéspedes tocando a sus ventanas.
Construido en 1987 por el empresario brasileño Francisco Ritta Bernardino de acuerdo con las costumbres de las tribus nativas, este hotel ecológico es hoy el más grande jamás construido sobre copas de árboles. Además, está inspirado en la interminable cruzada de Jacques Cousteau de preservar el frágil ecosistema del Amazonas.
Iglú de cinco estrellas
Durante 24 años consecutivos, en el norte de Suecia, el Icehotel ha sido reconstruido cada noviembre al llegar el invierno. Y no es que su estructura requiera de constantes ajustes, sino que el material con que está hecho comienza a escasear al llegar la primavera. Este hotel de lujo, construido enteramente de hielo, cuenta con 80 habitaciones, algunas de ellas equipadas incluso con saunas. Como un elemento de exclusividad, también cada año artistas invitados rediseñan las art suites del hotel, reinventando no sólo la forma y decoración de las habitaciones, sino dejando su huella en la experiencia que viven sus huéspedes.
Habitaciones escavadas en la roca
Habitaciones escavadas en la roca
De una cautivadora sencillez, el hotel Yunak Evleri Cave ha sido cuidadosamente diseñado para no interferir en el entorno natural en el que se ubica. Incrustado en la antigua ciudad griega de Capadocia, en Turquía, este hotel es único en su especie. Sus 30 habitaciones, de un ambiente que se remonta a los siglos V y VI, se encuentran acogidas dentro de las estructuras cavernosas características de la zona. La joya de la corona es su suite especial que evoca la de una mansión griega del siglo XIX.
La arquitectura del hotel está pensada para fundirse con el entorno, lo que lo convierte en una pieza de extraordinaria belleza y sencillez. Laberintos y pasajes de piedra forman los senderos del hotel, sumergiendo a sus huéspedes y visitantes entre sus estructuras rocosas. Sus habitaciones son más bien sencillas, elegantemente austeras. El Yunak Evleri Cave transporta a sus huéspedes a otras épocas, apartándolos del bullicio de las urbes y colocándolos en un universo que parece no ser parte de este mundo.
Una mina de oro
Una mina de oro
Si le gusta aventurarse en lugares verdaderamente insólitos, hospedarse en el hotel Sala Silvergruva en Suecia podría no parecerle tan descabellado. Situado dentro de las minas mejor conservadas del mundo, este establecimiento cuenta con muchos de los servicios que se esperan de un hotel de cinco estrellas, incluido un spa y, por extraño que parezca, un campo de golf. Sin embargo, puede que eche de menos algunas cosas, como la cobertura en su teléfono móvil.
El mayor atractivo de Sala Silvergruva es la habitación ubicada a mayor profundidad: la suite Grusvit, que se aloja en una sala de la mina a 155 metros bajo tierra. Quienes optan por alojarse en esta habitación deberán usar ropa de abrigo, pues la temperatura en esta suite es considerablemente más baja que en el resto del hotel.■
