Este imponente edificio del siglo XII, declarado Bien de Interés Cultural en su categoría de monumento, fue reformado por el arquitecto Marco Serra, quien respetó fielmente el legado milenario de la edificación al conservar su arquitectura románica y barroca, así como los usos monásticos originales de las salas. “Transformar un viejo monasterio implica participar en un diálogo de mil años de antigüedad. Mi discreción rinde homenaje a quienes hablaron antes que yo”, explica el arquitecto italiano.
El Abadía Retuerta LeDomaine ha sido concebido para ser un referente de enoturismo de primera categoría y ocupar un lugar preferente en el segmento de hoteles de superlujo en España. El establecimiento cuenta con 18 suntuosas habitaciones dobles y tres excelentes suites, equipadas con un mobiliario contemporáneo que proporciona el máximo confort a sus huéspedes. Tiene además un centro de negocios con salas de reuniones, y ofrece un conjunto de servicios entre los que destacan el gimnasio y la sala de yoga. Destaca su precioso y tranquilo jardín museo, situado en el exterior de la abadía, con obras del escultor alemán Ulrich Rückriem, de estilo vanguardista, en perfecta contraposición con la piedra antigua del histórico edificio.
La gastronomía
El hotel cuenta con restaurantes y diversos salones y bares donde el cliente puede relajarse, como la Sala Capitular y El Salón de la Chimenea. Con el asesoramiento de Andoni Luis Aduriz, el prestigioso y premiado chef del célebre restaurante Mugaritz de San Sebastián, España, se consigue una amplia oferta gastronómica de alto nivel.
En sus fogones, como jefe de cocina está Pablo Montero, un cocinero formado en el entorno del restaurante Mugaritz, con la experiencia suficiente para plasmar la filosofía de Aduriz. Montero, quien ha trabajado en restaurantes de gran prestigio e influencia internacional, basa su propuesta culinaria en una visión creativa de la tradición y el uso de ingredientes locales, entre los cuales brilla la presencia de brotes, hierbas y verduras.
El maridaje se completa con los vinos propios de la bodega Abadía Retuerta y la antigua Bodega de los Monjes, contigua al restaurante, que guarda auténticas joyas de la región y del resto del mundo. Tres espacios con ofertas gastronómicas diferenciadas dan servicio a todo tipo de clientes: el Refectorio, una cocina contemporánea, de corte creativo, que se apoya en los productos y productores de la zona; la Vinoteca, un restaurante en el que se disfruta de una cocina tradicional de tapas siempre muy vinculada a los vinos de Abadía Retuerta; y el Jardín del Claustro, abierto solamente durante los meses de verano, que ofrece una cocina más sencilla, cuya composición culinaria está fundamentada en productos de estación.
Experiencias singulares
Este admirable hotel es un destino turístico de primer orden que tiene como objetivo preservar la historia y expandir la cultura del vino a través de una experiencia única. El programa que ofrece Abadía Retuerta LeDomaine puede incluir: un circuito en todoterreno para acercarse a los lugares más singulares de la zona, entre los que destaca el espectacular viñedo; una visita a la bodega, que une la mejor tradición con la más alta tecnología; o una visita a las zonas más emblemáticas de la Abadía de Santa María de Retuerta.
Además, se organizan otras actividades en torno al mundo del vino, pensadas para adaptar el programa a cada visitante. Entre ellas destaca la opción de participar en la vendimia y realizar uno mismo la recogida de la uva, una cata comentada de los vinos en la nueva vinoteca, o cursos específicos de cata, entre otras interesantes propuestas.
Los clientes de Abadía Retuerta LeDomaine también podrán disfrutar de propuestas tan inéditas como un programa en el que los huéspedes experimentarán ser parte del equipo de cocina del restaurante, descubrir el paisaje con un vuelo en helicóptero, disfrutar de un espectáculo de cetrería (exhibición de vuelos de aves), o un relajante paseo a caballo. ■