*azureazure ha hecho el firme compromiso de ayudar tanto a nuestros lectores como a las industrias más castigadas por esta pandemia. ¡Estamos contigo en estos difíciles momentos que vive nuestro planeta! A lo largo de esta crisis, estaremos publicando nuestros artículos regulares, que esperamos te inspiren y ayuden a escapar un rato de la terrible situación actual, junto a contenido específico sobre el Coronavirus a nivel mundial. ¡Nos encantaría escuchar de ti! Contáctanos a azure@azureazure.com.*
Si eres un viajero empedernido, no ves la hora de que acabe la pandemia para poder recorrer el mundo y estás buscando un lugar especial en donde no tengas que cruzarte con mucha gente y puedas recuperar la paz después de la estela de angustia dejada por el coronavirus, toma nota: Adare Manor en Irlanda, Mkombe House Lamai en Tanzania, Hacienda San Antonio en Méjico, Amangiri en Utah, Estados Unidos, y Keemala en Tailandia. Si no conoces aún estos hoteles, inclúyelos ya en tu lista de lugares que no puedes dejar de visitar próximamente.
Es cierto que, de acuerdo a los últimos estudios y encuestas realizados, y tras la devastadora pandemia de este 2020, la mayoría de las personas aún no se atreve a viajar para evitar el riesgo de contagio que conllevan no sólo las aglomeraciones de gente, sino los lugares muy concurridos que no permiten mantener la tan aconsejada distancia social. Basados en este nuevo requerimiento, nuestro equipo de azureazure ha seleccionado cinco lugares sumamente especiales en los que podrás disfrutar de un lujo soñado casi en exclusiva. ¡Acompáñanos!
El palacio Adare Manor
Si quieres sentirte como un rey, Adare Manor, aislado en un suntuoso y moderno palacio que se alza en medio de 840 acres de bosques, praderas, lagunas y verdor, es el lugar ideal. A orillas del río Maigue, que baña el condado de Limerick en Irlanda, el mítico edificio es uno de los hoteles más suntuosos de Europa.
La edificación original fue construida en la primera mitad del siglo XVIII por el segundo Conde de Dunraven, Henry Windham, quien decidió crear un “Calendar House” que no sólo representase el calendario anual, sino que tuviese los más opulentos lujos posibles.
Diseñado al estilo neogótico por James Connolly, James Pain y George Richard Henry, el edificio ofrece una clara referencia al calendario con sus 365 ventanales (días del año), 52 chimeneas (semanas del año), 7 pilares (días de la semana) y 4 torres (estaciones del año). La sección más impactante del palacio es su gigantesca galería, de 132 pies de largo y 26,5 de alto, inspirada en la sala de los espejos del palacio de Versalles. Fue en el año 1860 cuando se inauguró finalmente este espléndido palacio.
La propiedad perteneció a la familia del Conde por más de 100 años, y después fue comprada por un consorcio de inversiones europeo. A partir de la década de 1980 se convirtió en un lujoso hotel y campo de golf que alojó a estrellas internacionales como Catherine Zeta Jones, Tiger Woods y el expresidente Bill Clinton, entre otras celebridades. Lee más de este hotel, aquí.
Mkombe House Lamai, en el corazón del África
Inmerso en el enorme y virgen Parque Nacional Serengueti, en Tanzania, se encuentra el resort Mkombe House Lamai, el primer y único resort de lujo en el que los turistas tienen un alojamiento exclusivo y completamente aislado de la civilización, sin compartir espacios con otros grupos de visitantes.
Diseñada por la reconocida arquitecta Joanna Cooke, la casa es ideal para una familia. Tiene cuatro dormitorios grandes en suite separados en dos sectores de la vivienda, y amplísimos espacios comunes: un enorme comedor, una sala con todas las comodidades y un centro de entretenimiento multimedia. Además de estar rodeada de grandes ventanales, tiene hermosas terrazas con áreas de solario y piscinas, con vistas privilegiadas a la sabana típica de esta hermosa región de África.
Esta casa de ensueño es un verdadero paraíso para experimentar la vida y la naturaleza salvaje africana en un ambiente de total exclusividad que incluye chef privado, mayordomo y niñeras. Lee más de este lugar, aquí.
Resort Keemala, Tailandia, en equilibrio con la naturaleza
El resort Keemala es uno de los pocos lugares en el mundo que ha sido construido siguiendo varias creencias y estilos de vidas. Quienes lo visitan pueden conectarse con su interior, sentirse en paz y disipar el estrés siguiendo las filosofías de los cuatro clanes que, hace varios siglos, eligieron la isla Phuket para convivir armoniosamente con la naturaleza.
Sus 16 cabañas tienen en su exterior una ducha y una bañera independiente. Algunas cuelgan de los árboles como jaulas de pájaros, y otras están construidas de tal manera que se confunden con el entorno. Todas están separadas entre sí y ofrecen unas privilegiadas y espectaculares vistas de la selva.
Desde tiempos remotos, el islote de Tailandia ha seducido a todo tipo de viajeros con la belleza de sus playas y su exuberante bosque tropical. También ha sido bendecido con un clima agradable y abundante agua limpia y cristalina. Todas estas cualidades se fusionan como por arte de magia en Keemala con la cultura tailandesa y ofrecen una estancia más propia de un cuento de hadas que de la realidad. Lee más sobre este lugar, aquí.
Hacienda San Antonio: el esplendor del Méjico colonial
Si quieres perderte en una inmensa y exclusiva hacienda colonial mexicana en medio de las montañas y gozar de un clima privilegiado al que llaman ‘eterna primavera’, tendrás que recorrer un largo camino en Comala, en el estado mexicano de Colima, o viajar en helicóptero para poder llegar a la Hacienda de San Antonio. Al traspasar su imponente portal de entrada, descubrirás allá a lo lejos uno de los hoteles boutique más aclamados de México. Su arquitectura colonial y su afortunada remodelación han sido la combinación perfecta para enamorar a todo aquel que la visita.
La hacienda, construida en 1890 por Don Arnoldo Vogel, un inmigrante y empresario alemán, está rodeada de un paisaje paradisíaco: bucólicos campos de flores, bosques y arroyos cantarines.Tiene 25 habitaciones en suite, techos de casi 8 metros de altura y una decoración que ha cuidado minuciosamente cada detalle.
Entre las amenidades y actividades que ofrece este santuario se incluyen canchas de tenis, servicio de spa, visitas guiadas a los cafetales de la hacienda, avistamiento de aves, degustación de vinos, y maravillosos paseos a caballo, entre otras. Lee más de este lugar, aquí.
Amangiri hotel y spa, lujo en el desierto de Utah
Con una arquitectura perfectamente integrada en el desierto, el hotel-spa Amangiri en Utah es ideal para aislarse del bullicio metropolitano o de los rezagos de la reciente pandemia y disfrutar casi en solitario de los tesoros vírgenes del Grand Circle, una región de imponentes mesetas y grandes cañones. Sin duda, un paisaje icónico del legendario Oeste de los Estados Unidos, donde se encuentran algunos de los atractivos naturales más importantes de ese país, como el Gran Cañón, el Cañón Bryce, el Parque Nacional Zion y el Valle de los Monumentos.
Rodeado por el Grand Canyon (Gran Cañón), este resort de lujo se construyó en el 2009 en torno a una gran piscina central con vistas al Grand Staircase Escalante Monument Valley, en el sureste de Utah, una de las joyas geológicas más importantes del mundo.
El Spa Amangiri (palabra que en su lengua nativa significa “montaña de la paz”) ofrece tratamientos de belleza y bienestar, con terapia de flotación, baños de vapor y sesiones de yoga y pilates. Nada mejor para recuperarse de las tensiones y angustias que todos hemos vivido durante estos difíciles momentos y llenarnos de paz y energía positiva. Lee más sobre este lugar, aquí.