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La automotriz británica BAC presentó una versión radicalizada de su auto “Mono”, especialmente diseñado para ser transportado en yates. El vehículo combina las dos pasiones del fundador de Briggs Automotive Company (BAC), Ian Briggs: la náutica y automóviles deportivos. Su compañía, con sede en Liverpool, saltó a la fama en los últimos años por fabricar “Mono”, un monoplaza de calle estilo Fórmula 1, capaz de acelerar de 0 a 60 millas por hora (100 km por hora) en tan sólo 2,8 segundos.
Este modelo estrictamente deportivo fue diseñado para transmitirles a sus propietarios las mismas sensaciones que experimentan los pilotos profesionales pero en un auto destinado a circular en las calles.
Su versión para yates, el BAC Mono Marine Edition, es un impresionante monoplaza de última generación, equipado con un poderoso motor Ford de 2500 centímetros cúbicos, cuatro cilindros en línea y 305 caballos de fuerza, capaz de empujar a este livianísimo deportivo, de tan sólo 580 kilogramos (1.280 libras), a una velocidad máxima de 170 millas por hora (273 kilómetros por hora aproximadamente).
Este modelo estrictamente deportivo fue diseñado para transmitirles a sus propietarios las mismas sensaciones que experimentan los pilotos profesionales pero en un auto destinado a circular en las calles; y vaya que lo logra.
El “Marine Edition” ofrece una cobertura anticorrosiva en todos sus componentes que garantiza la protección ante las erosiones producidas por el salitre. A su vez, el chasis ha sido especialmente diseñado para ofrecer puntos de enganche y apoyo que facilitan la carga y descarga del automóvil desde y hacia el yate, a partir de la grúa de fibra de carbono incluida en el kit que acompaña al vehículo.
Aparte del sistema de grúa universal, esta edición especial también incluye un cubículo de clima controlado (Environmental Control Container System), que asegura las condiciones ideales de temperatura y humedad para almacenar el automóvil a bordo.
Todo el kit está especialmente diseñado para incluir al auto de lujo entre los tenders complementarios típicos de un súper-yate. Se fabrica a pedido del cliente, con la opción de personalizar colores, tapizados y detalles estéticos del automóvil, para hacerlo combinar con la embarcación que lo aloja.
El precio del coche acondicionado, junto con el sistema de grúa y el compartimiento de almacenamiento ronda los $800.000, cuatro veces más que la versión regular del BAC Mono. Pero teniendo en cuenta que está dirigido a un nicho de mercado muy exclusivo, para acompañar embarcaciones que superan ampliamente las decenas de millones, este no parece un precio excesivo.
El BAC Mono Marine Edition es una apuesta osada, que apunta al pujante mercado de embarcaciones de lujo, industria que ha demostrado crecimiento constante en los últimos años. ■