En 1986, el fundador de NetJets pensó que era necesario crear un programa que permitiera disfrutar de las ventajas de los vuelos en avión privado sin las molestias del mantenimiento ni el exceso de gastos. Su solución fue desarrollar un modelo de propiedad compartida dentro de la industria aeronáutica. NetJets vuela hoy a más de 170 países y cubre más de 300.000 vuelos al año.
El modelo de propiedad compartida de NetJets se basa en tres innovadores programas: NetJets Share, NetJet Lease y Marquis Jet Card.
Los dos primeros suponen comprar o alquilar, por un tiempo concreto, un determinado modelo de avión de la flota de NetJets. A través de un contrato de alquiler, el usuario disfrutará de todas las ventajas de ser propietario sin tener que invertir un gran capital.
Los períodos de arrendamiento comienzan en 50 horas de vuelo anuales, con incrementos sucesivos de 25 horas. Dependiendo del tipo de avión que elija el cliente, puede tener un jet listo para su uso cuando lo necesite avisando con cuatro horas de antelación.
La otra posibilidad es el programa Marquis Jet Card: se compran 25 horas de vuelo en el jet que el usuario prefiera. Al mismo tiempo, la opción “combo” permite dividir las horas compradas entre dos aviones diferentes.
NetJets está respaldado económicamente por Berkshire Hathaway, compañía de Warren Buffett, que avala la seguridad de los aviones y la inversión de sus clientes. Los jets de la empresa tienen una capacidad de entre 7 y 14 pasajeros, y una autonomía de vuelo de 7.700 kilómetros. ■
