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A todos los que disfrutan de las embarcaciones, los autos deportivos y la tecnología se les ha pasado alguna vez por la cabeza la idea de poder moverse en un anfibio por tierra y agua sin necesidad de cambiar de vehículo. Y en el caso de los propietarios de yates de gran porte, esta opción resulta el ideal de embarcación complementaria o chinchorro.
A continuación, presentamos tres vehículos cuyo diseño, tecnología y prestaciones hacen realidad esa posibilidad:
El Quadski, anfibio de Gibbs
Este divertidísimo todoterreno es capaz de retraer sus cuatro imponentes ruedas —con tan solo apretar un botón— y pasar a la navegación en menos de 5 segundos. El Quadski anfibio cuenta con un potente motor DOHC de BMW de 1.3 litros, cuatro cilindros y 16 válvulas. Aunque, donde mejor se mueve sobre tierra es en terrenos escarpados y difíciles, dada su condición de 4×4, puede alcanzar una velocidad máxima que supera los 70 km/h (43,5 mph), la misma que es capaz de desarrollar en el agua. Hasta el momento, su prototipo ofrece capacidad para uno o dos pasajeros en su versión XL y su fabricante, Gibbs Sports Amphibians, de Michigan, Estados Unidos, ha anunciado su lanzamiento para el próximo mes de noviembre con un precio de 40.000 dólares.
Tender 33, la limusina anfibia de Nouvage
Después analizar detenidamente el mercado de los superyates de lujo y las costumbres de sus usuarios, la empresa Nouvayage de Boston, Massachusetts, decidió presentar su nueva propuesta: la limusina anfibia Tender 33. El espectacular vehículo —con una longitud de 10 metros y capacidad para 12 pasajeros y dos tripulantes— desarrolla una velocidad máxima de 136 km/h (84,5 mph) en tierra y 28 nudos sobre el agua. Con su interior de absoluto lujo, su cabina con temperatura controlada y baño a bordo, la impresionante limusina se ofrece como el complemento perfecto para quienes deseen transportarse con estilo, mientras su yate los espera anclado en el mar, lejos del muelle. El precio estimado en 2 millones de dólares hace que la limusina Tender 33 de Nouvoyage sea uno de los vehículos anfibios más costosos del mercado en la actualidad.
El chinchorro anfibio GT Tender
Realizado a pedido para el superyate Blade de MMGI Shipyard, este espectacular chichorro anfibio fue construido en Nueva Zelanda por NZ Tenders, en conjunto con el arquitecto naval Georgi Yankov de GY Boat Design Allure Marine. ¿El propósito? Fabricar un vehículo anfibio con aspecto de automóvil deportivo. El resultado fue el sorprendente GT Tender, capaz de desarrollar una velocidad de 35 nudos sobre el agua y solo 10 km/h (6 mph) sobre tierra firme. Construido en fibra de carbono ligera y con 8,5 metros de longitud, este vehículo anfibio tiene capacidad para 6 personas y cuenta con ciertas comodidades como nevera a bordo, lavabo, ventanas laterales, planchada con escalera de acceso al agua y acceso para sillas de ruedas. Sin duda, un capricho a la altura de la embarcación madre a la que acompaña. ■
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