En el sofisticado mundo de las perlas, un nombre brilla por su legado y la impecable belleza de sus piezas: Mikimoto. Con más de 120 años de historia, esta exclusiva casa de joyería y perlas honra su leyenda y rinde homenaje a su fundador con su más reciente colección Four Seasons, inspirada en las cuatro estaciones del año. Según el diseño, las piedras preciosas y las perlas utilizadas en cada pieza evocan la primavera, el verano, el otoño y el invierno.
Las perlas Mikimoto ostentan el sello de perfección, delicadeza y belleza que su fundador Mikimoto Kōkichi buscaba cuando, tras años de arduo trabajo, logró la primera perla de cultivo, a partir de la cual inició su negocio en la industria de las perlas. A la par con su eterna aspiración de cultivar una perla perfecta, el sueño de Mikimoto siempre fue “adornar con perlas el cuello de las mujeres en todo el mundo”. Este sueño se ha convertido en realidad, pues no hay mujer elegante que no se sienta atraída por la belleza y brillo de estas joyas. De hecho, cada vez es mayor la demanda de las perlas de cultivo de Mikimoto, consideradas unas joyas del mar y un misterio de la naturaleza.
La firma Mikimoto no está sola en el mercado de las perlas. Sin embargo, esta casa centenaria —considerada entre las más lujosas del mundo por la WWD, “la biblia de la moda”— siempre ha sido sinónimo de exclusividad. Desde sus comienzos, la pasión de Mikimoto Kōkichi por el perfeccionismo permeó todos los aspectos del proceso de cultivo de las perlas. Años de investigación y dedicación, batallas contras las adversidades de la naturaleza, litigios legales en torno a la patente de invención y la obsesión de Mikimoto por perfeccionar las técnicas de cultivo y mejorar la apariencia de las perlas hicieron posible que la casa japonesa pudiese ofrecer en la actualidad exclusivas perlas de cultivo famosas por la perfección de su forma, su singular superficie lisa y su lustre distintivo. El cultivo de la perla negra del Mar del Sur es otro de los logros de Mikimoto. Cultivada en las aguas templadas de Okinawa, se caracteriza por su gran tamaño —10 milímetros— y por las múltiples tonalidades naturales que refleja.
La naturaleza, principio y fin de las piezas de Mikimoto, siempre ha sido la principal fuente de inspiración para sus diseños. Y la colección Four Seasons lo confirma una vez más: cuatro conjuntos que evocan las notas, tonos y sensaciones de cada estación del año.
Las piezas de Invierno, compuestas por perlas del Mar del Sur —tan blancas como la nieve— y adornadas con zafiros azules y diamantes blancos, recuerdan a los gélidos parajes de los glaciares. Luego, como en una sutil transición, de las piezas de la Primavera emanan el florecimiento de la naturaleza y el crecimiento del espíritu hasta llegar a su plenitud. La mezcla entre turmalinas, amatistas, zafiros púrpuras y diamantes que decoran las perlas reflejan la vitalidad y el aire de optimismo que se experimentan durante esta estación.
Las piezas de Verano, por su parte, expresan la dualidad de esta estación: zafiros en tonos rosa, naranja y amarillo evocan los románticos atardeceres que se pueden disfrutar en la playa, mientras que los zafiros azul eléctrico nos sumergen en las aguas que alivian las altas temperaturas de la temporada. Y así llega la última transición, el Otoño, y con él, zafiros amarillos y naranjas que envuelven con aires de nostalgia la perla dorada del Mar del Sur, creando un conjunto de collar y anillo único por su belleza y elegancia.
Four Seasons ha entrado a formar parte de la leyenda. Basada en algo tan simple y natural como son las estaciones del año, la nueva colección de Mikimoto es un ejemplo de exclusividad y sofisticación. Una colección con la que sin duda cualquier mujer puede sentirse identificada, ya sea luciendo la belleza de una estación en específico o mostrando el encanto de la transición entre las cuatro estaciones, igual que ocurre continuamente cada año. ■