Lalique es una de las empresas cristaleras más tradicionales del mundo, reconocida por sus exquisitas y refinadas piezas. Sus más de 120 años de historia la posicionan como la compañía símbolo del lujo francés, a partir de los diseños de sus joyas, muebles, obras de arte, así como de sus espectaculares frascos de perfume. De hecho, sus piezas son muy buscadas por los coleccionistas de arte de todo el mundo y muchas de éstas se encuentran en exposición en prestigiosos museos.
En esta ocasión, la empresa francesa se hizo cargo del diseño y de la fabricación de una de las botellas de tequila más bellas de la historia, para contener un espirituoso realmente memorable.
Se trata de un corte de distintas partidas de tequila añejo, seleccionadas a mano por los maestros tequileros de Hacienda Patrón en los depósitos de añejamiento de Jalisco, a partir de tequilas que han sido guardados al menos cuatro años en barricas nuevas de roble americano y en barricas de roble francés, nuevas y usadas, que le otorgan su identidad única, de gran equilibro y marcado paso por madera.
El maestro destilero de Hacienda Patrón, Francisco Alcaraz, describe al Patrón en Lalique Serie 1 de la siguiente manera: “Es un tequila extra-añejo extraordinario, de gran equilibrio y gran complejidad, donde se pueden apreciar sabores a caramelo, miel, vainilla, frutas secas y nueces. Éste es un espirituoso de gran belleza, tanto por dentro como por fuera.”
Por su parte, la botella está inspirada en la planta utilizada para la producción del tequila, el agave, y su tapón ilustra su corazón, la piña, que es el fruto del cual salen los jugos que más tarde se convertirán en delicioso tequila.
Los maestros artesanos de la cristalera francesa diseñaron la pieza a partir de su técnica identificativa, en la que se contrastan planos de cristal liso con planos de cristal esmerilado, que hacen resaltar cada uno de los meticulosos detalles que decoran la pieza.
“Crear una botella tan única es muy difícil, y representa muchas horas de trabajo debido a la complejidad del diseño. Nuestros maestros artesanos han puesto todo su conocimiento y pasión en la producción de cada una de las botellas”, explica Silvio Denz, presidente ejecutivo de Lalique.
La producción mundial del Patrón en Lalique Serie 1 está limitada a sólo 500 botellas y se presenta en una caja de regalo de exquisito diseño, revestida de cuero, que incluye certificados de autenticidad, un libro encuadernado también en cuero y un video sobre el proceso que llevó a la creación de este producto de colección que ostenta un precio de US$7.500. ■