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Existen restaurantes de lujo en la capital de Japón que encierran en su interior la simplicidad, el refinamiento y la autenticidad de la verdadera cocina japonesa. Los restaurantes Kanda y Hommage, premiados con 3 y 2 estrellas Michelin respectivamente, son ejemplos de esa virtuosa cocina milenaria, plena en matices y sensaciones.
Tradicionalmente, la gastronomía japonesa venera y respeta el producto, que utiliza en sus diferentes elaboraciones planteamientos gustativos y visuales que la convierten en puro arte y placer para los sentidos. Eso es lo que encontramos en la cocina de estos dos extraordinarios restaurantes.
Kanda
Tres estrellas Michelin lucen en Kanda, un restaurante dirigido por Hiroyuki Kanda, uno de los chefs más reconocidos de Japón. El chef Kanda comenzó su carrera como cocinero a los 23 años, cuando marchó a París a trabajar durante cinco años como jefe de cocina en un restaurante japonés.
Después de regresar a Japón, trabajó en el restaurante Aoyagi durante trece años, antes de abrir el suyo propio, Kanda, en 2004.
Kanda se basa en el concepto de transmitir el espíritu del arte japonés —contemplativo, frugal e inquietante al mismo tiempo— a través de la cocina. Sus clientes, entre los que se encuentran personajes del mundo de las finanzas locales, artistas y turistas de todo el mundo, disfrutan una experiencia gastronómica reveladora.
“Nunca imaginé que la cocina japonesa pudiera llegar a ser tan sofisticada”, cuenta un maravillado viajero francés en redes sociales. “Los platos nos dejaron con la boca abierta a mi y a mi familia”.
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En Kanda, los platos rezuman fantasía y originalidad. Para beber, este restaurante en Tokio ofrece varios de los mejores vinos del mundo y sake, que combinan perfectamente con creaciones como las carrilleras de res al estilo japonés, cocidas a fuego lento con vino tinto. Otro plato tradicional, pero llevado a niveles sublimes, el sukiyaki, se cocina aquí lentamente, con huevos batidos a punto de nieve.
Hiroyuki Kanda utiliza tiernas verduras de temporada en sus celebradas sopas, incluidas las habas en primavera, el maíz en verano y el ginkgo en otoño. Una cena en Kanda es memorable en cualquier momento del año.
Hommage
Con dos estrellas Michelin, el restaurante Hommage —palabra francesa que significa «honor», «tributo»— está conducido por el chef Noboru Arai, nacido en Asakusa, Tokio.
Tras sus comienzos en restaurantes de Tokio, se mudó a Francia para estudiar cocina y trabajar en numerosos restaurantes con estrellas Michelin. Volvió a Tokio en 2000 y comenzó a trabajar en el restaurante Hommage.
Su culinaria bebe de la mejor tradición de la cocina japonesa a la que el da un interesantísimo giro con los conceptos, cocciones y sabiduría de la cocina francesa. Sus platos muestran un esmerado conocimiento y las presentaciones son de una exquisitez y un minimalismo sublimes.
En Hommage hay que dejarse llevar de la mano por Noboru Arai, pues no se sabe lo que se va a probar hasta que llega el plato a la mesa. La carta de vinos es extraordinaria y el servicio, elegante y discreto. Un lugar para relajarse y disfrutar de las mejores elaboraciones en un espacio único. ■