Para los amantes del buen champagne francés suele resultar difícil decidirse por una marca u otra, pues siempre hay una alternativa más seductora que supera a la anterior. A continuación, sugerimos tres magníficos espumosos que podrían convertirse en sus favoritos. Se trata de champagnes del tipo cuvée, lo máximo de la gama de cada firma: Laurent-Perrier Cuvée Grand Siècle, Billecart-Salmon Grande Cuvée Vintage y Krug Grande Cuvée Brut.
Laurent-Perrier Cuvée Grand Siècle
Bernard de Nonancourt, director de Laurent-Perrier durante más de medio siglo ―y héroe de la Resistencia francesa contra la ocupación nazi― fue un empresario innovador y de gran talento que se ganó el apelativo de “el Gran Bernard”. En la década de 1950, soñó con crear un cuvée de prestigio que fuera muy diferente a los de otras grandes casas de la región de Champagne, en Francia. El Laurent-Perrier Cuvée Grand Siècle se elabora con la mezcla de tres grandes añadas pertenecientes a viñedos calificados como Grand Cru, con un 55 por ciento de uva chardonnay y un 45 por ciento de pinot noir. Debido a su perfecto equilibrio entre potencia y delicadeza, y entre intensidad aromática y frescura, es ideal para beberlo solo o acompañando un buen caviar iraní o un sencillo canapé de salmón escocés.
Billecart-Salmon Grande Cuvée Vintage
En el corazón de Champagne, en el encantador pueblo de Mareuil-sur-Ay, está ubicada la bodega Billecart-Salmon, propiedad de una misma familia desde hace casi 200 años tras el matrimonio de Nicolas François Billecart y Elisabeth Salmon en 1818. Elaborado únicamente con uvas chardonnay, el Billecart-Salmon Grande Cuvée Vintage está considerado como uno de los mejores Blanc de Blancs del mundo. Surge de una selección de viñedos Grand Cru ―situados en Le Mesnil-sur-Oger y Chouilly, en el noreste de Francia― que le aportan esa estructura, longevidad y finura tan extraordinaria y lo convierten en un champagne único. Notas minerales, con miel y toques de avellana, son su particularidad. Un champagne ideal para compartirlo con sushi o ensaladas frías con marisco y frutos secos.
Krug Grande Cuvée Brut
Fundada por el visionario Joseph Krug en 1843 en la localidad de Reims, Krug Champagnes es una de las grandes marcas de champagne. El Krug Grande Cuvée Brut es el arquetipo de la filosofía y savoir faire de Krug: una mezcla de alrededor de 120 vinos de diez o más cosechas diferentes, algunos con más de 15 años de añejamiento. Mezclando tantas cosechas de Krug Grande Cuvée se consiguen sabores y aromas únicos y una elegancia absoluta, algo imposible con los vinos de un solo año. Su finura excepcional es el resultado de una estancia de, al menos, seis años en las bodegas. Se necesitan más de veinte años para elaborar cada botella de Krug Grande Cuvée. Este champagne se presta para acompañar múltiples combinaciones culinarias: desde las más simples, como un queso parmesano maduro, hasta otras más complicadas, como un sofisticado plato de rodaballo condimentado con finas virutas de trufa blanca del Piamonte. ■