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Central, como se refieren cariñosamente a la región de Central Otago los neozelandeses, está ubicada en la mitad de la Isla Sur. Su paisaje atrae turismo nacional e internacional, pues su territorio incluye vastos terruños ondulantes, montañas accidentadas cubiertas de nieve, ríos de color azul claro y extensas colinas cubiertas de fina hierba mecida suavemente por el viento.
Es, además, la zona productora de vino más austral del mundo, y su enorme amplitud térmica entre el día y la noche, sumado a veranos calurosos e inviernos nevados, la hacen ideal para el cultivo de la uva francesa pinot noir, tan popular en la región de Borgoña.
Por su viveza, toques minerales, carácter ahumado y sabores que recuerdan a frutos del bosque, los vinos pinot noir de Central Otago se han convertido en los mejores del mundo junto a los franceses.
Fue un francés, Jean Désiré Féraud, quien plantó las primeras cepas en Central Otago hacia 1864, en un pequeño huerto llamado Monte Christo, cerca del arroyo Waikerikeri, en el valle del mismo nombre. Desde entonces, la producción de pinot noir no ha hecho más que subir y acrecentar su fama.
Por su viveza, toques minerales, carácter ahumado y sabores que recuerdan a frutos del bosque, los vinos pinot noir de Central Otago se han convertido en los mejores del mundo junto a los franceses.
La mayoría de las bodegas del lugar, conscientes de su fama, orientan su producción a la elaboración de vinos de alta gama. Creaciones singulares que en los últimos años han conseguido alzarse con prestigiosos premios internacionales, hasta hacerle sombra a los afamados pinot noir borgoñones de Beaune y Côte d’Or.
Existen grandes bodegas en la región, pero si tuviera que inclinarme por algunas, no dudaría en mencionar: Felton Road Wine Ltd., Hinton Estate Vineyard y Mount Michael Wines.
La moderna bodega Felton Road Wine Ltd., está situada en el epicentro de Bannockburn, en el corazón de Central Otago. Entre sus vinos pinot noir, destaca su 2014 Felton Road Pinot Noir Block 3, un vino de nariz profunda en la que se identifican aromas a frutas oscuras y complejas notas de rosas. El paladar es opulento, resaltando sus notas a chocolate negro intenso, moka y frutos rojos muy maduros. Un vino sofisticado y sensual que no puede confundirse con ningún otro, pues es único.
Hinton Estate Vineyard, es la bodega más conocida de la zona de Alexandra, pues su fama y reputación viene marcada por cinco generaciones de una misma familia que han trabajado con ahínco para ofrecer algunos de los mejores vinos de Central Otago. El Hinton Estate Pinot Noir 2008 ofrece un color rojo rubí profundo y aromas a cerezas negras, ciruelas con toques de hierbas y roble de nuez, una maravilla. Despunta en la boca por sus taninos aterciopelados, ostentando un acabado largo y sabroso como bien merece un pinot noir de su talla.
Mount Michael Wines, en Cromwell, creada en 1994, es una pequeña bodega soñada por la pareja formada por Sue y Martin Anderson. Allí elaboran el Mount Michel Central Otago Pinot Noir 2015, que sumerge a quien lo prueba en una suerte de paraíso sensorial, gracias a sus aromas a frutos del bosque, toques a roble de la barrica y moka. Al probarlo destaca por su potencia y elegancia con sabor a ciruelas y moras muy maduras. Su persistencia es tal que media hora después de haberlo tomado, todavía se percibe en la boca. Puro deleite, un festival de pinot noir, un verdadero legado Neozelandés. ■