El prestigioso Nolet Reserve, reconocido internacionalmente como una de las ginebras premium más peculiares y costosas del mundo, es el homenaje de Carolus Nolet a la tradición familiar.
Nolet es una destilería holandesa de tres siglos de historia. Fue fundada por Joannes Nolet en el año 1691 en la ciudad de Shiedam. Diez generaciones más tarde, Carolus Nolet decidió lanzar al mercado una edición especial de reserva que expresara todo el conocimiento obtenido por la familia en sus 300 años en la industria.
Esta empresa fue fundada en la zona donde se creó la tradicional ginebra holandesa, bebida oficial de ese país. Durante mucho tiempo, la familia se dedicó a perfeccionar el complejo proceso de destilación floral y frutal para la fabricación de ginebras de máxima calidad.
La destilería Nolet es conocida principalmente por su vodka Ketel One, de importante presencia internacional.
En honor a la tradición familiar de diez generaciones, Carolus Nolet Sr. decidió confeccionar un producto de reserva que es supervisado por el director de la compañía hasta en el más mínimo detalle, al punto de que cada una de las botellas es aprobada por el mismo Carolus en persona.
Cada año se realiza una edición limitada de esta bebida de colección, presentada en una caja de regalo de delicada madera pulida y simple diseño, que cede todo el protagonismo a la bebida que contiene.
Al adquirir uno de sus ejemplares, lo primero que llama la atención del comprador es la serie de sellos de autentificación y números de producción presentes en la botella, su caja, los sellos de sellado y los certificados que recuerdan al proceso para autentificar piezas de alta relojería.
Se trata de un gin de un tono dorado, logrado a partir del azafrán, que acompaña un complejísimo proceso de destilados frutales y florales. Este incluye rosa turca, frambuesa, verbena, melocotón y el infaltable enebro del típico gin holandés.
En la boca se revela como un espirituoso intensamente floral, que de todas maneras deja expresarse a la fruta presente con predominio de la fresa y el picante propuesto por el alcohol. El final es intenso y sostenido, con la complejidad de un gin muy rico en ingredientes, revelando algunos dejos cítricos y la inconfundible presencia del enebro.
Para disfrutar la experiencia única que propone esta bebida, su creador recomienda beberlo solo, en sorbos pequeños, y si queremos resaltar sus aromas, podemos acompañarlo con hielo. Según Carolus Nolet Sr., esta es una ginebra para disfrutar en momentos especiales, acompañado por seres queridos o también en soledad, una manera de poder apreciar en detalle todos los sabores propuestos.
Hoy, en su undécima generación, la empresa sigue sorprendiendo al mundo con destilados excepcionales y el Nolet Reserve es la joya familiar que identifica su tradición.
El Nolet Reserve es una bebida compleja y exquisita que encarna siglos de tradición y convida a los consumidores con un destilado irrepetible de autor. ■