Un vino elaborado con merlot es una creación sublime y sofisticada, con un potencial aromático muy interesante que nos recuerda a frutas rojas, especias y ciruelas maduras, con abundantes notas florales como la violeta y, en su mejor expresión, se perciben el cuero y el tabaco entre sus aromas más curiosos.
A continuación, una selección especial de tres merlots extraordinarios:
Castello Vicchiomaggio FSM 2006
PRODUCTOR: Castello Vicchiomaggio // REGIÓN: Toscana, Italia // UVAS: 100% merlot
La bodega italiana Castello Vicchiomaggio produce en la Toscana este prestigioso vino elaborado con uvas merlot. De color violáceo intenso, el Castello Vicchiomaggio FSM 2006 está considerado como uno de los mejores merlot del país transalpino. Posee aromas de frutas del bosque como moras, arándanos y frambuesas. En el paladar resulta sabroso, fino y agradable, y gracias a sus taninos de gran calidad, es persistente y equilibrado con una perfecta armonía entre los sabores de las frutas y los toques avainillados de la barrica de roble que lo contuvo. Un vino delicioso para momentos especiales.
Caus Lubis Magnum 1997
PRODUCTOR: Bodega Can Ràfols dels Caus // REGIÓN: Penedés, España // UVAS: 100% merlot
Arcilloso y calcáreo es el suelo donde crecen las uvas merlot con las que se elabora este vino ligado al terruño. El Caus Lubis Magnum 1997 es un vino rico y complejo, elaborado con cuidado y grandes dosis de mimo para alcanzar su máximo esplendor. De color granate intenso y brillante con reflejos violáceos, posee interesantes aromas de plantas autóctonas, pero también de ciruelas rojas, moras, bayas silvestres y notas de cuero. En la boca es amplio y largo con toques de frutas negras como las cerezas y las grosellas. Su final es impetuoso, intenso, carnoso y cálido. Un vino para beberlo con tranquilidad y disfrutarlo.
Henschke Abbotts Prayer Merlot Cabernet 2010
PRODUCTOR: Henschke // REGIÓN: Adelaide Hills, Australia // UVAS: 68% merlot y 32% cabernet sauvignon
De color carmesí intenso, el Henschke Abbotts Prayer Merlot Cabernet 2010 es un vino que embelesa por sus profundos aromas de frutas silvestres, moras y grosellas rojas maduras, junto con hierbas de bosque, toques tostados de la barrica, chocolate negro y tabaco. En la boca es potente e impetuoso, con recuerdos de frutas negras, moras, violetas y especias. Tiene un final perdurable, amigable, largo y suave, como sólo un buen vino con carácter puede lograrlo. ■