Más de mil años después, sus actuales propietarios, la pareja formada por Veronika Kirchmair y Claus Haslauer, lo veneran y cuidan como a un tesoro, pues aprecian y defienden la imponderable herencia de un lugar que fue mencionado por primera vez en un documento escrito por Alcuino de York, un erudito de la época de Carlomagno (siglos VIII-IX).
Con empeño y trabajo la pareja lo ha transformado en un restaurante de lujo muy apreciado en toda Europa, y le han añadido su propio estilo y pasión por los detalles, salvaguardando la historia de un espacio privilegiado por el cual han pasado reyes, reinas, obispos y otros personajes célebres.
A lo largo de su existencia, el restaurante ha tenido que cerrar en varias ocasiones, como cuando se convirtió en cuartel general de las tropas francesas durante la invasión napoleónica de principios del siglo XIX.
St. Peter Stiftskeller ofrece una atractiva mezcla de innovación, buena comida, vinos escogidos y un servicio a la altura de su rica historia. La piedra antigua y los interiores decorados en estilo contemporáneo otorgan al establecimiento un estilo glamuroso y un ambiente especial.
Considerado como uno de los principales restaurantes de la bella Salzburgo, su cocina, dirigida con arte y dedicación por el jovencísimo y apasionado chef local Andreas Krebs, tiene ofertas plenamente austriacas, con reminiscencias de cocina de autor que no defraudan a nadie.
En su carta se podrán hallar delicias locales frescas de temporada, pero también la mejor carne irlandesa de vaca Hereford, los quesos franceses más destacados o el jamón ibérico español más apreciado.
Otro de los grandes atractivos de este legendario restaurante es su amplia gama de comedores –hasta once–, en los que se puede disfrutar de almuerzo, cena, conciertos, banquetes privados, celebraciones familiares, etc.
Les aconsejo de corazón que en su próximo viaje a Salzburgo acudan al restaurante St. Peter Stiftskeller y reserven, en el suntuoso salón barroco, la cena-concierto Mozart, que les trasladará a finales del siglo XVII, la época del insigne compositor, y la revivan en medio de velas, trajes de época, instrumentos musicales y recetas antiquísimas.
Les recomiendo en especial la sopa de pollo al limón claro con requesón y romero, o la pechuga de capón glaseada con vino tinto y hierbas aromáticas, gratén de patatas y verduras del jardín, entre otras exquisiteces.
El menú se sirve en los entreactos del concierto que interpreta el prestigioso grupo instrumental y vocal “Amadeus Consort Salzburgo”, fundado en 1996. Compuesto por seis músicos y dos cantantes, interpretan bellas piezas del afamado compositor clásico.
St. Peter Stiftskeller no es solo el restaurante más viejo de Europa, sino también un lugar que rinde homenaje a lo mejor de la tradición culinaria y la historia de Austria. ■
