Viena, la capital de Austria, es una ciudad en la que tradición y modernidad han sido una constante de su historia, lo cual también se refleja en su amplia y sugerente oferta gastronómica. Silvio Nickol y Konstantin Filippou son dos restaurantes vieneses premiados con estrellas Michelin que, con acierto y sabiduría, muestran una concepción culinaria que vale la pena conocer. Vea aquí nuestra selección de restaurantes de todo el mundo.
Silvio Nickol
Coburgbastei 4
El chef de origen alemán Silvio Nickol es el alma del restaurante, bautizado con su nombre, ubicado en el interior del lujoso y céntrico hotel vienés Coburg Palais. Nickol tiene una opinión muy clara acerca de su trayectoria profesional: “La pasión, el trabajo y la suerte son los tres pilares fundamentales de mi carrera”, confiesa. Y tiene razón al citar estas tres premisas, porque su recorrido hasta convertirse en el admirado chef que es hoy, se ha caracterizado por un trabajo duro y constante, realizado con pasión. También ha tenido la fortuna de aprender de grandes figuras de la cocina contemporánea, como Lothar Eiermann y Heinz Winkler, entre otros. Nickol dirige las cocinas de este restaurante gourmet que desde el 2012 ostenta orgullosamente dos preciadas estrellas Michelin. El interior del restaurante es de una elegancia refinada. Un muro de amatista en la entrada da la bienvenida y el curioso estilo decorativo del comedor ―una mezcla de la década de 1960 con reminiscencias futuristas― lo hacen el lugar idóneo para disfrutar de un menú en el que predominan los productos típicos, provenientes de granjas seleccionadas. Es una cocina creativa que juega con la imaginación y el talento de un chef tan personal y único como Silvio Nickol. Atención a una carta de vinos con más de 5.500 referencias ―una de las más extensas de Europa― que sorprende por sus originales propuestas… y también por sus rarezas.
Konstantin Filippou
Dominikanerbastei 17
La cocina sencilla, pura y honesta que desarrolla Alexander Konstantin Filippou en su restaurante, premiado con una estrella Michelin, se caracteriza por una pasión irreprensible por los ingredientes, así como por su buen ojo para lo que realmente importa: la esencia del gusto. De padre griego y madre austriaca, Alexander refleja un origen multicultural. Es como un puente, perfectamente cimentado, entre dos formas de entender la gastronomía: el norte y el sur de Europa. Esto le permite un acercamiento único a una brillante culinaria de fusión en la que sobresale un preciosismo sin igual en la presentación de unos platos que recuerdan a cuadros de Kandinsky o Joan Miró. Con capacidad para 35 comensales, el comedor es un espacio decorado con elegancia y sobriedad, con vistas al corazón del restaurante: la cocina. El Kitchentable de Konstantin Filippou es el sitio preferido para los que desean observar de cerca el trabajo artístico del maestro y su fiel equipo. Además, el establecimiento dispone de un comedor privado, situado en una sala exclusiva y acogedora, ideal para pequeñas cenas, fiestas familiares o eventos profesionales. No se pierdan gustosos y destacados platos de autor como su exquisito guiso bacalao con caviar o su escalfado de caballa (macarela) con rábano picante, por citar algunas de sus brillantes concepciones. Interesante bodega y servicio discreto y profesional. ■