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La cocinera brasileña Helena Rizzo ha sido elegida la mejor chef del mundo en el 2014 al alzarse con el premio Veuve Clicquot Best Female Chef, creado en honor de la pionera gastrónoma que dio nombre al famoso champán. Rizzo, quien lleva más de 26 años en la profesión, fue homenajeada en la ceremonia de entrega de los galardones a los 50 mejores restaurantes del mundo en 2014, en Londres.
La joven chef es propietaria —junto a su marido, el chef español Daniel Redondo— del restaurante Maní de Sao Paulo, Brasil, que en 2014, fue elegido el 36º mejor restaurante del mundo por la revista Restaurant, y el segundo mejor en América del Sur, detrás de D.O.M. En 2015, fue galardonado con una estrella Michelin.
Rizzo, quien se formó en el restaurante El Celler de Can Roca, elegido mejor restaurante del mundo en 2013 y 2015, fue seleccionada también en 2013 como la mejor chef de América Latina por la revista Restaurant. En 2018, Rizzo apareció como juez en el episodio «Brasil» de The Final Table, temporada 1, y en 2019, Food & Wine nombró a Maní en su lista de los 30 mejores restaurantes del mundo.
Helena Rizzo (Porto Alegre, 1978) dejó su carrera como modelo y sus estudios de arquitectura para dedicarse a su verdadero sueño: ser cocinera. “La cocina me robó el alma, sentí que ahí estaba mi lugar”, confiesa. En Sao Paulo fue aprendiz de los mejores chefs del momento —como Emmanuelle Bassoleil, Luciano Bossegia y Neka Menna Barreto— y trabajó como chef principal durante más de dos años en el Na Mata Café, un restaurante del que fue copropietaria.
Siempre inquieta y ansiosa de nuevas experiencias culinarias, la joven chef decide dejar Sao Paulo y se traslada a Italia, donde trabajó en el restaurante Sadler de Milán, premiado con dos estrellas Michelin. Posteriormente, en España, fue aprendiz en El Celler de Can Roca, donde conoció a su esposo.
Desde el 2006, Rizzo y Redondo regentan el restaurante Maní en Sao Paulo, con una propuesta culinaria a dúo en la que impera el respeto a las prácticas e ingredientes culinarios tradicionales de Brasil, que ellos trabajan con minuciosidad y acierto con técnicas modernas y una clara influencia de la mejor cocina de autor española.
“No soy, ni nunca he pretendido ser, ‘la mejor chef femenina del mundo’”, declaró la chef Rizzo cuando recibió el premio a su labor culinaria, y destacó el duro trabajo realizado por todo su equipo en el restaurante. “Cada uno de nosotros puede ser el mejor en una situación particular, en un momento dado, a los ojos de una determinada persona. ¡Por supuesto, me siento muy feliz y honrada de recibir este premio y estoy agradecida por ello!”.
Con esta distinción, la chef Helena Rizzo se unió a un grupo exclusivo de mujeres cocineras con talento como Elena Arzak, de Arzak, en España; Anne-Sophie Pic, de la Maison Pic, en Francia; y la ganadora del año anterior a ella, Nadia Santini, de Dal Pescatore, en la campiña italiana. ■