L’Era d’en Jaume
El Principado de Andorra, ese pequeño e idílico país situado en los Pirineos y fronterizo con Francia y España, tiene interesantes propuestas turísticas, así como una atractiva oferta culinaria en la que se entremezclan las formas y los usos de dos cocinas de gran calidad: la española y la francesa.
En Andorra existe un importante número de restaurantes donde se pueden degustar deliciosos platos tradicionales, elaborados con productos autóctonos de gran calidad y combinados con los sabores de la cocina moderna, que se hacen acompañar por grandes vinos franceses, españoles y también andorranos.
Es indiscutible que una visita gastronómica a este país debe comenzar por las bordas, las antiguas casas situadas en la alta montaña, hoy reconvertidas en acogedores restaurantes donde se sirve una sustanciosa cocina tradicional que aprovecha productos de la zona como las setas, el cabrito, las trufas, los quesos, las mermeladas y los embutidos, entre otros.
Casa Canut
Borda Xica y Borda Raubert, ubicadas en La Massana, al noroeste del país, son dos buenos ejemplos de una oferta arropada en siglos de historia gastronómica y en platos tan suculentos como el pollo a la cazuela con boletus, el fricandó con caracoles o las sabrosas sopas de ajo que reconfortan el cuerpo y el espíritu en los fríos días nevados.
En la preciosa localidad medieval de Ordino, el restaurante tradicional L’Era d’en Jaume, construido en el interior de una antigua era dedicada antaño a guardar la hierba y el grano dentro del pueblo, es el lugar ideal para conocer la mejor cocina casera de Andorra. Son muy recomendables sus deliciosas carnes a la brasa o escabechadas como la perdiz, su maravilloso rabo de toro estofado y sus postres caseros como la crema catalana.
Casa Canut
Pero, sin duda alguna, el mayor número de buenos restaurantes se concentra en Andorra La Vella, capital del principado. En el interior del lujoso Hotel Plaza se halla el restaurant La Cúpula, al frente de cuyos fogones se encuentra el prestigioso chef Sergi Jerónimo, quien se formó en París junto al gran Dominique Bouchet. La suya es cocina de mercado con toques de autor en un entorno elegante y sofisticado.
También el Andorra Park Hotel, prestigioso cinco estrellas con spa situado en una zona residencial de la capital andorrana, cuenta con És Andorra, un restaurante con cocina de autor en un ambiente exclusivo y clásico.
Interior de una borda
En A Casa Canut, un céntrico hotel gastronómico también de cinco estrellas, con dos buenos restaurantes: La Grandalla dels Set Pètals y La Barra del Canut– Ramon Canut dispone platos basados en la cocina de mercado, con pescados frescos y mariscos de primera calidad, en un entorno de tranquilidad y finura.
Para conocer mejor los productos del país, hagan una parada en Marquet Gourmeterie, una exclusiva tienda delicatessen con restaurante que desde 1974 ofrece productos gourmet. Se trata de un buen lugar para comprar excelentes quesos y vinos, y para probar en su restaurante delicias como una selección de embutidos de la firma Joselito con un buen Burdeos francés o un Rioja español.
Plato de La Cupula
Y si es usted de los que adora las pizzas, les recomendaré unas muy especiales: las que elabora el chef francés Didier Amalric en su pequeño restaurante L´Escenari de Pizzes. Son pizzas gourmet, elaboradas con productos ecológicos y con ingredientes como foie, carpaccio de buey, queso Reblochon, semillas de amapola, crema de coco, jamón de Bayona o vaporización de tequila, entre otros ingredientes.
Ésta es Andorra: una joya, tanto por su entorno como por su cocina. ■