Parece que todo lo que toca este hombre se convierte en oro, bonanza y prosperidad.
En 1998, Richard Reed y un grupo de amigos crearon en el Reino Unido una compañía llamada Innocent Drinks que produce batidos de frutas. Diez años después, aparecía en las noticias por el grandioso crecimiento de la empresa, que llegó incluso a despertar el interés de la más grande productora de refrescos del mundo. Así fue como logró que Coca Cola comprase su participación del 58% en Innocent Drink, pagando por ella $65 millones de dólares.
RICHARD REED.
Reed es la misma mente que impulsa ahora la promoción del proyecto de convertir al Reino Unido en la mayor galería de arte del mundo.
No piense que esto será para el siglo XXII. Este hombre no se anda con trucos. En una entrevista publicada en el 2011, decía que si usted tiene un 70% de convencimiento de su idea, debe enfrascarse en ella y sacarla adelante, y que es absolutamente disuasorio esperar a estar cien por ciento convencido, ya que de ser así, nunca la logrará. Por tanto, si Richard Reed tiene un 70% de convencimiento, tiene los medios y tiene los apoyos que se necesitan, todo indica que Gran Bretaña se habrá convertido este verano en la mayor galería de arte del mundo.
El proyecto se titula Art Everywhere (“Arte en todas partes”). La idea es llenar las calles con obras de los autores británicos de primera línea, y generar con ello un debate sobre la identidad del Reino Unido y su arte.
Durante dos semanas de agosto, las imágenes ampliadas de 50 obras de arte inundarán las vallas publicitarias de todo el país. Las obras fueron elegidas a través de internet, mediante concurso público efectuado el pasado 24 de junio.
El proyecto cuenta con la colaboración del Tate y Art Fund, una organización independiente cuyo fin es apoyar y promover el trabajo de museos y galerías del Reino Unido. Para la financiación cuentan con la participación del público, que deberá hacer una aportación de tres libras (cerca de $5 dólares).
Art Everywhere Project.
Artistas cotizados han mostrado su apoyo y entusiasmo por el proyecto. Damien Hirst es uno de ellos. Ha dicho que esto “le da al público una voz y una oportunidad para votar por lo que quieren ver en sus calles.”
Richard Reed insiste en que Art Everywhere pretende ser simplemente una “alegre celebración sin ningún objetivo que no sea inundar las calles de arte y conmemorar el talento creativo y el legado de este impresionante país”.
Por alguna razón… mera intuición, presumimos que Art Everywhere, tal y como está planteado, es un proyecto “tentativo”. Es muy probable que sea exitoso y que Richard Reed lo mejore. ■