Por primera vez, Park Avenue Armory, la exclusiva asociación que incluye a muchos de los más prestigiosos dealers de arte y el sindicato de anticuarios de Paris, se unió al conocido productor Sanford L. Smith y a las casas de arte americanas, para llevar a cabo lo que para muchos ha sido catalogado como el mejor evento de diseño y antigüedades que hasta la fecha se ha realizado en Manhattan. Los ciudadanos de Nueva York y todos los visitantes de la ciudad, tuvieron acceso a lo mejor del diseño europeo y norteamericano, bajo el techo del edificio del Armory, en Park Avenue.
La feria, realizada a finales del año pasado, fue el reflejo de lo que hoy predomina en el coleccionismo: lo ecléctico. Los tiempos en que se coleccionaba una única línea de arte o de época ya es historia. Coleccionistas de todo el mundo compran ahora obras de diferentes géneros y eso no le ha pasado inadvertido a los que han hecho posible que el Salon haya tomado forma. Arte contemporáneo se mezcla con piezas del s.XVIII, arte japonés y africano.
Así, el salón se ha centrado en piezas desde mitad de siglo hasta el presente. Antigüedades se mezclan con arte moderno y contemporáneo, piezas asiáticas y africanas. Los objetos expuestos son muy diversos: desde las más exquisitas joyas cuyos precios parten de $1.500 hasta pinturas valoradas en millones de dólares.
Más de 50 entidades exhibieron en el salón, 31 de las cuales venían directamente de la pasada Paris Biennale, que el alemán Karl Lagerfeld diseñó en el Grand Palais de París en Septiembre de 2012. Para muchas de esas casas era la primera vez que exhibían en Nueva York y, viendo el éxito del Salón, no será la última.
El Salón incluyó algunos de los más renombrados dealers en estilo francés clásico y galerías tradicionales con reconocido prestigio mundial. El Presidente del Syndicat de Antiquaires es propietario de una galería especializada en arte chino y un largo etcétera de profesionales reconocidos del arte que estuvieron presentes.
El Salón acogió a galerías tan ilustres como Galerie Beres, Galerie Boulakia, Galerie Robilant + Voena y Brand & Lorenceau, entre otras. La feria también incluyó a ingleses, austriacos, belgas, suizos, una galería sueca y la catalana Mayoral Galeria D’Art, que mostró maravillosas piezas de Dalí, Picasso y Miró.
Mención especial merece la galería Kraemer, la más antigua de París, especializada desde 1875 en piezas del s. XVIII, muchas de ellas ahora en posesión de museos como el Louvre de París, el Metropolitan de Nueva York, el J. Paul Getty de Los Ángeles e incluso en instituciones como la Casa Blanca o el Palacio de Versalles y en casas de coleccionistas privados como el diseñador Karl Lagerfeld.
Con sede en el número 43 de rue Monceau de Paris, en el impresionante palacio familiar la Kraemer da una muestra maravillosa de arte contemporáneo junto a piezas de Luis XIV, Luis XV y Luis XVI. Una tradición pasada de generación en generación y cuyos miembros estaban presentes en el Salón mostrando su apoyo a ésta gran iniciativa. ■