¿Le sorprendería saber que sus abuelos practicaban sexo con más frecuencia que usted? Pues probablemente sea cierto.
Para muchas parejas, la vida parece sólo un largo camino hasta que encuentran algo de tiempo para el sexo u otros placeres. Somos un país lleno de gente ocupada, con demasiados compromisos, estresados, falta de sueño y por supuesto, cansada.
Una enorme cantidad de investigaciones recientes, revelan la importancia de disfrutar del placer en nuestra vida. El placer, no sólo reduce el estrés, también mejora la salud, el bienestar y la longevidad. Es probable que esto no le sorprenda pero ¿cuando fue la última vez que disfrutó de forma consciente de algo placentero?
¿Por qué no organizar un cita con su pareja para disfrutar de un poco de sexo Wabi Sabi? Permítame que se lo explique. Wabi Sabi es un antiguo arte japonés que honra todas las cosas viejas, usadas, imperfectas y perecederas y busca la perfección en la imperfección.
Si aplica el Wabi Sabi a su vida sexual, eso implica que no pasa nada si está demasiado cansado, estresado o no tiene tiempo. Y practicará el sexo a pesar de todo, aunque ni usted ni su pareja lo desee de verdad. El hecho de que se sienta desanimado o desconcentrado o desconectado de su pareja, no significa que no pueda hacer el esfuerzo de volver a conectar y encender la energizante y viva fuerza del sexo.
Sea creativo. Encuentre un nuevo momento, un lugar nuevo, una nueva forma de iniciar la conexión. Incluso si se siente tonto, torpe o extraño, hágalo. Recuerde que esto es Wabi Sabi y no tiene que ser perfecto. Y salga como salga, aburrido, rutinario o excitante, elija encontrar la parte bonita y perfecta. Piense que es algo grande sólo por el hecho de haberse esforzado en dar a su pareja y a usted mismo algo de atención, afecto y placer.
Cuando experimentamos placer nos relajamos y el flujo de emociones positivas aumenta por millones. Dedicar tiempo a incorporar placeres en su vida, le hará sentir más calmado, más feliz y más receptivo a la hora de recibir amor a todos los niveles. ■