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Las manos dicen mucho sobre de la salud de una persona. Si observas cuidadosamente tus uñas, es posible que descubras imperfecciones como puntos blancos y asperezas que, a primera vista, no pueden parecer muy importantes, pero que podrían indicar una deficiencia de vitaminas e incluso problemas graves de salud. Sin embargo, existen curas basadas en una buena nutrición para casi todos los problemas, como uñas manchadas, estriadas, blandas u opacas. Seguir una dieta bien balanceada y rica en proteínas, vitaminas y minerales hace que las uñas sean más fuertes, que crezcan más rápido y que, en general, sean más saludables.
Estas son las sugerencias que te ofrecemos para cada problema que puedas encontrar en tus uñas:
Opacas
Si tus uñas se ven opacas o muestran estrías de otros colores, la causa podría ser una deficiencia de vitaminas. También puede ser el resultado de un problema de salud subyacente o de una deficiencia general de nutrientes.
Por otro lado, a medida que uno envejece, el cuerpo deja de absorber el complejo de vitaminas B, siendo la vitamina B7, o biotina, la que afecta directamente en la salud de las uñas y el cabello. La biotina promueve el crecimiento celular y asegura que el cuerpo metabolice los aminoácidos que forman las proteínas, lo cual favorece que las uñas crezcan más fuertes y saludables.
Las manifestaciones de deficiencia de biotina se refeljan en las uñas pálidas, de color marrón o gris, y en las de los pies, decoloradas. Trata de mejorar tu dieta con alimentos ricos en vitaminas B, como huevos, atún, germen de trigo, granos enteros, leche, queso y salmón.
Frágiles o quebradizas
La fragilidad de las uñas hace que se rompan con facilidad. Aunque esto suele ser por lo general un signo de envejecimiento, también puede deberse a un bajo funcionamiento de la glándula tiroidea (hipotiroidismo), por lo cual recomiendo que te hagas análisis para ver tus niveles hormonales. La buena noticia es que algunos alimentos pueden ayudar a que tu tiroides funcione correctamente.
Los aguacates (paltas) y las patatas son excelentes fuentes de tirosina, un aminoácido cuyos bajos niveles están directamente relacionados con el hipotiroidismo. Además, los arándanos proveen yodo, otro elemento esencial para que la glándula tiroides funcione normalmente. Consuma regularmente media taza de arándanos, que contiene unos 400 mcg. de yodo, para una tiroides sana.
Además, trata de comer alimentos ricos en Omega 3, ya que las deficiencias de este ácido graso están también relacionadas con niveles bajos de hormonas tiroideas. Para ello, te sugiero que añadas dos cucharadas de aceite de linaza a su cereal favorito o a sus batidos. Y ten en cuenta que los problemas de tiroides toman algún tiempo en mejorar o en superarse, así que no verás una diferencia en la apariencia de tus uñas hasta que haya transcurrido por lo menos todo un ciclo de crecimiento.
Estrías o surcos
Las estrías suelen aparecer y agrandarse debido bien sea a una deficiencia de los minerales silicio y hierro o a la edad, lo que causa variaciones en la renovación celular y una creciente incapacidad de la uña para retener humedad. A medida que envejecemos, va disminuyendo la función de la matriz de la uña, lo que se manifiesta en surcos longitudinales o estrías. Sin embargo, si las estrías son horizontales pueden indicar un problema de salud.
Para suplir la deficiencia de los dos minerales, incluye en tu menú de desayuno una mezcla de leche y muesli –avena cruda y fruta-, que es una fuente excelente silicio, así como el pan de cebada. Para optimizar los resultados, combina los alimentos ricos en silicio con los alimentos ricos en hierro, como cereales fortificados, huevos y espinacas.
Blandas y débiles
Las uñas están compuestas de capas laminadas de una proteína llamada queratina. Debido a que la queratina es la proteína principal que mantiene la estructura de éstas, comienza por consumir alimentos saludables que pueden aumentar los niveles de la misma. Si comes regularmente carne, huevos, quinua, frijoles u otros alimentos ricos en proteínas, se asegurarás los nutrientes que ellas necesitan para mantenerse saludables. Trata de consumir por lo menos unos 170 gr. (seis onzas) al día para evitar que se pongan débiles y blandas. ■