La casa de vacaciones «Le Cabanon» de Le Corbusier y la Villa E-1027 de Elieen Gray están oficialmente abiertas al público después de numerosas remodelaciones llevadas a cabo por una organización llamada Cap Moderne, una asociación sin fines de lucro «encargada de la rehabilitación y gestión turística, cultural y comercial del sitio ubicado en Roquebrune-Cap Martin», según el sitio web de Cap Moderne.
Durante varios años pasé temporadas en Roquebrune-Cap Martin, una comunidad francesa a las afueras de Mónaco, y una de mis actividades matutinas favoritas era caminar por los senderos rocosos junto al mar, que conducían a las obras arquitectónicas de Le Corbusier y Eileen Gray.
Algunas de esas obras incluyen refugios modernos de mediados de siglo diseñados por Le Corbusier, llamados Les Unités de Camping, y un restaurante modernista, l’Étoile de Mer, propiedad de Thomas Rebutato, donde solía cenar Le Corbusier.
Estas atracciones se pueden visitar y apreciar durante un recorrido a pie que muestra los conceptos modernistas utilizados en estas construcciones. Otras atracciones que los huéspedes pueden ver durante la visita son una nueva librería boutique y un centro de visitantes que se encuentra en un antiguo vagón de tren en la cercana estación SNCF.
Las nuevas atracciones fueron presentadas este año por Cap Moderne en asociación con el Centre des Monuments Nationaux.
Sin embargo, aquellos interesados en aprender un poco más sobre la Villa E-1027 —cuyo nombre proviene de un código ideado por Eileen Gray y su pareja, Jean Badovici, que colaboró con ella— pueden explorar el interior de la casa.
La villa fue la primera creación arquitectónica de Eileen Gray y fue construida entre 1926 y 1929. Su diseño minimalista, de paredes blancas y ángulos rectos, pintan un contraste austero pero inquietante junto a los pinos verdes que rodean la villa.
En cuanto al interior de la casa, Gray incluyó muebles móviles y artefactos de iluminación que ella diseñó. Uno de ellos se convertiría en una de sus piezas más icónicas, la mesa lateral de acero tubular. Según la historia oficial, Gray diseñó la mesa para que su hermana pudiera desayunar en la cama sin dejar caer migas en las sábanas, gracias a un mecanismo ajustable que las atrapaba.
Cuando la villa se terminó de construir, Le Corbusier se enamoró de ella, lo que provocó visitas frecuentes del arquitecto. De esas visitas resultó un mural en una de las habitaciones que Le Corbusier tituló Tres mujeres.
Más tarde, el restaurador Thomas Rebutato construyó junto a la villa E-1027 un edificio de influencia modernista que serviría como restaurante, llamado l’Étoile de Mer. Cuando el restaurante se abrió, se formó una amistad entre el hijo de Rebutato, Robert, y Le Corbusier, lo que resultó en que el arquitecto suizo realizara varias pinturas en las paredes del restaurante.
Más tarde, en 1951, Le Corbusier le pediría a Thomas Rebutato que le diera una parte de la tierra contigua para construir una casa de vacaciones. La cabaña Le Cabanon, hecha íntegramente con madera de pino, fue construida el mismo año y poco después, a cambio del terreno que Rebutato le entregó, Le Corbusier diseñó y construyó en ese terreno cinco unidades para acampar, que eran prototipos de una casa modular de descanso.
Sin embargo, las estructuras se dejaron deteriorar hasta 2015 cuando la familia Rebutato y la recientemente formada Asociación Cap Moderne se pusieron a restaurar las casas para abrirlas al público.
En abril de 2020, la Asociación Cap Moderne entregará la administración de estas edificaciones a Le Centre des Monuments Nationaux, una sociedad francesa de conservación del patrimonio, que supervisará la preservación del sitio con la esperanza de que se convierta en un sitio de peregrinación para los admiradores de la arquitectura moderna. ■