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La corriente arquitectónica denominada Movimiento Moderno, de principios del siglo XX, aprovechó las posibilidades de nuevos materiales industriales como el hormigón armado, el acero laminado y el vidrio plano en grandes dimensiones. A partir de entonces, se comenzó a desarrollar un nuevo concepto de construcción con componentes “prefabricados” en una planta industrial que luego serían utilizados en las nuevas edificaciones. De esta manera se reducían los costos y el impacto ambiental y se optimizaban los materiales y la energía.
Este concepto de construcción ha evolucionado enormemente y en la actualidad ofrece una exquisita combinación de eficiencia, diseño, elegancia, rapidez de desarrollo, ingeniería aplicada, modernidad, adaptabilidad y robustez. En este contexto de innovación y desarrollo tecnológico, una de las principales constructoras del mundo en esta industria es la alemana Huf Haus, que cuenta con centenares de construcciones realizadas en Europa, Asia y América, ofreciendo diseños y tecnologías que han cautivado a los clientes más exigentes en todo el planeta.
Un buen ejemplo de lo que esta empresa alemana es capaz de ofrecer se encuentra en Inglaterra. Una de las lujosas casa que Huf Haus ha levantado allí cuenta con unos 370 metros cuadrados (4.000 pies cuadrados) de construcción, jardín y garaje doble, y en la actualidad tiene un valor de mercado de alrededor de 2,5 millones de dólares. Su precio se justifica por sus excelentes comodidades y diseño.
Las Huf Haus están inspiradas en las antiguas casas alemanas de estructura de madera, que eran construidas para que duraran siglos y quedasen como legado familiar, generación tras generación. Con el mismo concepto de desarrollo, la empresa fundada en 1912 en Hartenfels, Alemania, comenzó a desarrollar en la década de 1950 tecnologías que le permitiesen mejorar la calidad de vida de los habitantes de las viviendas y cuidar el medio ambiente al mismo tiempo.
Hoy en día, sus diseños ofrecen estructuras independientes, mayoritariamente de acero, con paneles divisorios y exteriores tratados con aislantes térmicos y acústicos de última generación que ofrecen niveles de confort superiores a las construcciones tradicionales. En el perímetro de estas mansiones cobran protagonismo los enormes ventanales de triple vidrio que ofrecen espléndidas vistas al entorno de la casa y aprovechan la luz natural en todos los rincones, inclusive en los baños, los vestidores y los pasillos interiores. Por su parte, la eficiencia del consumo de energía es vital para la postura constructiva de la empresa, que ofrece habitaciones con resguardo térmico, sistemas de ventilación optimizados, sistemas inteligentes de calefacción y paneles fotovoltaicos generadores de energía integrados al diseño de la vivienda.
Otro rasgo de modernidad aplicado en este tipo de construcción es el panel integral de configuración y manejo de servicios de la casa, a partir del sistema inteligente HUF, que permite manejar la climatización, el cortinaje, los sistemas de seguridad y las luces, permitiendo configurar modos de uso que interpretan el entorno y se adaptan a las necesidades.
Sin contar el terreno, el coste de construcción de estas casas futuristas inspiradas en el pasado es de, aproximadamente, 500 o 600 dólares el pie cuadrado, y la empresa cuenta con un equipo de ingenieros, arquitectos, paisajistas, decoradores y fabricantes de mobiliario a disposición del cliente que garantizarán diseños únicos y absolutamente personalizados. También ofrece la ventaja de la inmediatez, pues el proceso de construcción toma un período promedio de tan sólo 14 meses.
Bellas, modernas, sustentables, cómodas, elegantes y con mucho estilo, estas nuevas mansiones prefabricadas —aunque costosas— se han convertido en la tendencia de esta última década en Europa. ■