Dynamo es un espectáculo de luz, color y movimiento de arte abstracto y arte cinético que despierta todo tipo de emociones. Es también experimentación. Probablemente, la abstracción es el movimiento artístico que más requiere la participación del espectador. La colaboración es necesaria para lograr la creación de ilusiones ópticas que se propone.
JESÚS RAFAEL SOTO. Penetrable BBL Azúl, 1999.
La muestra contiene 205 pinturas y esculturas de 150 artistas. Ocupa casi 4.000 metros cuadrados del Gran Palais de París e incluye obras en los alrededores del palacio. Se divide en dos categorías: la visión y el espacio, “subdivididas a su vez en temáticas como la permutación, lo concéntrico/excéntrico, la interferencia, la inmersión o la distorsión en función del propósito de la obra”, según reza el comunicado de prensa de la exposición.
Entre los autores españoles y latinoamericanos: Jesús Rafael Soto, Carlos Cruz-Díez, Elías Crespín y Alejandro Otero (Venezuela); Carmelo Arden Quin (Uruguay); Julio Le Parc, Antonio Asís, Martha Boto, Hugo Demarco, Horacio García Rossi y Luis Tomasello (Argentina); Mauricio Nogueira Lima, Lygia Clark, Sérvulo Esmeraldo, Almir Mavignier y Mary Vieira (Brasil); Francisco Sobrino y Ángel Duarte (España).
CARLOS CRUZ-DÍEZ. Transchromie mécanique 1965, 1965.
Entre los artistas no latinoamericanos: Bruce Nauman, Dan Flavin, Hans Haacke, James Turrell, Alexander Calder, Dan Graham (Estados Unidos); Yayoi Kusama (Japón-Estados Unidos); Jean Tinguely (Suiza); Marcel Duchamp y François Morellet (Francia); Bridget Riley y Conrad Shawcross; Anish Kapoor (India-Londres); Jeppe Hein (Dinamarca), Takis (Grecia). Recoge, además, obras de artistas que trabajan en conjunto.
Dynamo se expone en el Grand Palais de París hasta el 22 de julio. ■