Para crear el ambiente selvático que prevalece en el interior del Nirvana se utilizaron al menos diez variedades de madera, como el eucalipto, la teca o el roble. El piso está hecho de bambú muy finamente detallado, y en su salón principal, donde predominan los acabados con materiales naturales como el ónix blanco, el nácar o el cuero, hay un exótico vivero en el que conviven camaleones, lagartos y tortugas. Los seis niveles de la nave están interconectados a través de un ascensor con paredes de vidrio transparente. La cubierta principal de popa cuenta con una gran piscina ovalada de más de 7 metros, solario, un gimnasio completamente equipado y áreas de recreo que crean el espacio perfecto para grandes fiestas. La terraza ofrece vistas panorámicas y se convierte fácilmente en una plataforma para helicópteros.
El Nirvana tiene además amplias instalaciones deportivas y de entretenimiento que incluyen diez motos de agua, una sala de cine para proyecciones 3D y un escenario para actuaciones en directo. Cuenta con unas reservas de combustible, agua y comida equiparables a las de los cruceros transoceánicos, y alcanza una velocidad máxima de 19,5 nudos.
El súper yate Nirvana, que tiene un precio de 320 millones de dólares, es verdaderamente un palacio flotante ideal para la realeza. Pero si usted no tiene intenciones de ser su propietario, al menos podrá alquilarlo. Aun así comprobará que navegar a bordo de esta maravillosa nave lo hará sentir como un rey. ■