Es 3 de agosto de 1879, un toro sale al ruedo para ser lidiado en la plaza de Alicante y sorprende a los allí presentes por su extrema fiereza y osadía, dejando sin vida, según las crónicas de la época, a varios caballos picadores. Hoy, 125 años después y haciendo honor a su tradición taurina, el fabricante italiano de automóviles Lamborghini recupera el nombre de aquel histórico astado para bautizar a su nuevo súper deportivo: Huracán.
El Huracán LP 610-4 es fiero y muy ambicioso porque nace con un difícil cometido: relevar al ya desaparecido Gallardo, el automóvil más popular de la historia de Lamborghini y con más de 14.000 unidades salidas de la fábrica de Sant’Agata Bolognese. Como en estos casos el legado siempre pesa, el Huracán conserva el estilo de su predecesor, con líneas rectas y anguladas que demuestra que no se ha querido perder la buena genética que hereda.
Pero como suele ocurrir con los sucesivos eslabones de una cadena evolutiva, el Huracán mejora su especie. Es 330 libras más ligero, con un peso total de 3.135 lb (1.422 kg) y un motor V10 atmosférico de 5,2 litros que entrega 610 CV y 540 Nm de par máximo para mejorar las prestaciones de su predecesor con cifras notables: acelera de 0 a 60 millas por hora (100 km/h) en sólo 3,2 segundos y alcanza 202 mph (325 km/h) de velocidad máxima. Al propulsor se acopla una nueva transmisión automática de doble embrague y de siete velocidades, que reparte el envío de la fuerza entre las cuatro ruedas. Recorre una media de 18,82 millas por galón de gasolina (gasta 12,5 litros por cada 100 kilómetros recorridos) y emite 290 g/km de CO2.
De vuelta a su diseño, el Huracán sigue inspirándose en esa estética de los últimos Lamborghini (Veneno, Aventador, Reventón) que evoca la apariencia de los aviones de combate. Silueta afilada hacia la zaga, cuatro escapes circulares, faros con tecnología LED y frenos cerámicos. Estos son algunos de los rasgos que definen su carácter al analizarlo desde fuera. Mientras, por dentro, de acuerdo con lo poco que nos ha dejado ver el fabricante italiano hasta el momento, la sobria deportividad de su habitáculo sólo queda rota por el distintivo cuadro de mandos digital, que incluye una pantalla TFT digital de 12,3 pulgadas.
El Lamborghini Huracán LP-610-4 se presentará oficialmente en el Salón del Automóvil de Ginebra que se celebrará a comienzos del próximo mes de marzo. Está previsto que poco después, a mediados de año, esté disponible para su venta. Su mayor rival a partir de entonces será, como no podía ser de otra forma, un Ferrari, el atractivo coupé 458 Italia.
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