El Keecker, de unos 63 centímetros de alto por unos 40 centímetros de ancho, cuenta con un elegante diseño montado sobre un set de ruedas motorizadas que le permiten trasladarse por la casa de manera independiente. Una vez instalado, el robot estudia el diseño de la casa para poder moverse solo y sin dificultades. Sus funciones son múltiples, y entre ellas destacan la posibilidad de proyectar videos de alta definición en cualquier pared de la casa y reproducir música y sonido de alta fidelidad a partir de un sofisticado sistema de seis altavoces.
Pero eso no es todo; este elegante robot cuenta con el sistema operativo Android, que permite a sus propietarios controlarlo a través de sus teléfonos inteligentes. Gracias a ello, se podrán realizar llamadas a través de sistemas como Skype o WhatsApp, tomar fotos o filmar las habitaciones de la casa y mandar esa información a los teléfonos celulares de los propietarios. Además, permite controlar las luces y el volumen del sonido, así como medir los niveles de humedad, temperatura y dióxido de carbono de la habitación donde se encuentre, entre otras múltiples posibilidades. Lo más sorprendente es que todas estas funcionalidades pueden activarse con solo hablarle.
El lanzamiento del primer producto de la empresa radicada en París fue realizado en la feria anual CES 2014 de Las Vegas, Nevada. “Nuestro objetivo es crear una nueva dimensión entre la tecnología, el entretenimiento y nuestra imaginación. Keecker conjuga el mundo físico con el mundo digital, por primera vez”, asegura Lebeau, fundador y director ejecutivo de Keecker. “Podemos transformar nuestra casa con un dispositivo, eliminando la necesidad de utilizar los incontables aparatos que nos vemos forzados a usar en la actualidad”.
Lo más interesante del robot es que todas sus funciones apuntan a la interactividad constante. Por ejemplo, puede reflejar sobre las paredes imágenes de luz sobre las que usuario puede dibujar con el dedo para crear sus propias obras de arte, o crear un nuevo diseño emergente para su sala, sólo por una noche, transformando la decoración y cambiando el color de sus paredes. Asimismo, permite proyectar juegos de video y controlarlos a través de cualquier teléfono inteligente sincronizado.
Los nuevos dispositivos domésticos que combinan la robótica con la tecnología del entretenimiento y los avances en comunicación digital como el Keecker, no solo brindan una experiencia multimedia integral sino que también ofrecen una verdadera compañía que entretiene, protege e interactúa con sus propietarios. No se trata de un aparato aislado que sólo reproduce contenido.
Por su excelente diseño y sus incontables funcionalidades, el Keecker parece ser el “juguete” perfecto para niños y adultos. ■
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