Carnival Cruise Corporation está a punto de hacer historia: a partir de mayo de este año zarparán desde Miami, y cada dos semanas, cruceros a Cuba, después de 56 años de estar vedado el turismo a la isla desde territorio de Estados Unidos.
Esto será posible gracias a que la empresa ha creado un concepto de marca denominado Fathom, con el que inaugura una nueva categoría de viajes de impacto social, ofreciendo a los clientes experiencias que incluyen el intercambio cultural y humanitario directo con las comunidades visitadas.
Para los analistas de mercadotecnia, el proyecto intenta captar al segmento más joven y activo del turismo, los llamados millenials o miembros de la Generación Y.
Las coloridas calles de La Habana Vieja
Si bien los dos destinos iniciales previstos son República Dominicana y Cuba, no hay dudas que la gran novedad será ver, tras 56 largos años, atracar en los puertos de la mayor de las Antillas los cruceros atestados de entusiastas turistas dispuestos a recorrer un paisaje y una realidad social marginada de la comunicación global por más de medio siglo. Ecoturismo, voluntarismo, intercambio cultural y contacto sin intermediarios con la población cubana (como ha sido hasta ahora) son las opciones que forman parte de esta promisoria experiencia de viaje.
Edificio de Ministerio del Interior en la Plaza de la Revolución, La Habana
Los empresarios de la línea naviera esperan promover en los dos hermosos destinos el encuentro de los viajeros con microempresarios locales, la participación en actividades artísticas, ecológicas, educativas y humanitarias y las visitas a lugares de interés cultural e histórico.
Fathom iniciará sus operaciones en abril hacia República Dominicana, y en mayo hacia Cuba, con travesías de siete días, zarpando del puerto de Miami dos veces al mes. Los viajes se harán a bordo del barco Adonia, un crucero de Carnival Corp. que tiene capacidad para 710 pasajeros y cuenta, entre sus múltiples comodidades, con piscina, spa, gimnasio, varios restaurantes y biblioteca.
Vista de una calle en Cuba
Si bien desde hace años la empresa naviera realiza cruceros a las hermosas playas y puertos de República Dominicana, ésta es la primera vez que sus barcos arribarán a costas cubanas. Desde que en un giro histórico Estados Unidos decidió, en diciembre del 2015, restablecer relaciones diplomáticas con la isla, Cuba se ha convertido en uno de los destinos más atractivos para viajeros de todas partes del mundo. La llegada de Carnival a través de Fathom será todo un acontecimiento, como lo será, en su momento, el primer aterrizaje de una aerolínea estadounidense.
El carácter cultural y humanitario del crucero lo clasifica fuera de las convenciones tradicionales del negocio, y es ese enfoque el que le permite al viajero insertarse en una de las 12 categorías establecidas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) para visitar Cuba desde territorio estadounidense. Justamente, Carnival logró desde mediados del 2015 una licencia específica para llevar visitantes estadounidenses a las tres ciudades más importantes de la isla: La Habana, Cienfuegos y Santiago de Cuba.
Los programas de Fathom varían ligeramente según de cuál de los dos destinos se trate. En República Dominicana se concentran en causas de compromiso social tales como la reforestación, la protección ambiental, el acceso al agua potable, la ayuda a las pequeñas empresas locales, la incentivación de las artes y los deportes, la enseñanza del idioma inglés y el apoyo a iniciativas comunitarias.
Vista desde el interior de un coche clásico en la isla de Cuba
Mientras que en Cuba lo sensacional será redescubrir su rica herencia cultural, su patrimonio arquitectónico y su folclore. Admirar desde los palacetes barrocos y las fortalezas del siglo XVI hasta las obras más vanguardistas de la arquitectura prerrevolucionaria. Pasear en autos descapotables estadounidenses de los años 50 bajo un clima maravilloso, y aprender acerca de la música, las artes y el estilo de vida del pueblo cubano, algo que fue vedado al turismo occidental desde la década de 1960.
Será una oportunidad única para observar de cerca cómo vive el ciudadano cubano de a pie, conversar con los incipientes empresarios, intercambiar experiencias persona a persona y, ¿por qué no?, conocer los más recientes vestigios de la Guerra Fría.
Los ejecutivos de Carnival Corp. ven esta iniciativa como una oportunidad para reforzar a la empresa como líder en el mercado caribeño y anticiparse, en el caso Cuba, al cercano levantamiento del embargo. “Estamos muy emocionados y agradecidos por esta oportunidad de ayudar a los viajeros a experimentar la increíble belleza y la cultura de Cuba, y de ofrecer actividades de intercambio educativo y cultural que beneficiarán tanto a los visitantes como al pueblo cubano”, expresa Tara Russell, presidente de Fathom.
La costa de Cabarete, una ciudad en la región de Puerto Plata de la República Dominicana
Para la compañía, después de establecer República Dominicana como primer destino, Cuba significa una opción excepcional para ampliar la capacidad de ofrecer experiencias enriquecedoras a personas que viajan con un propósito social. “Nuestro objetivo sigue siendo el mismo para ambos destinos: permitir a los viajeros sumergirse, aprender, servir y prosperar, mientras realizan contribuciones duraderas y sostenibles sobre una base sistemática”, agrega Rusell. “Continuamos trabajando en lo que intentamos crear: una amistad hermosa y duradera con la población de Cuba”. ■