La ballerina sentada de Jeff Koons.
Una pequeña pieza ornamental de una bailarina de porcelana, que fuera encontrada en una fábrica rusa a comienzos del siglo XX, fue el origen de la imponente Ballerina sentada del artista estadounidense Jeff Koons. Construida con acero inoxidable, con pulido espejo y patinado transparente, alcanza una altura de más dos metros y un peso de 1.543 kilos (3.400 libras). Integra la serie Antiquity de esculturas de gran formato del autor, que representa temas históricos y mitológicos. Fue adquirida por el famoso coleccionista y presidente del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA), Eduardo Constantini, junto a otra obra de Koons, Pluto y Proserpina, por unos US$ 14,5 millones. Ballerina sentada se exhibe actualmente en la explanada del museo hasta principios de septiembre, fecha en que será trasladada a Miami, donde engalanará, junto a Pluto y Proserpina, el acceso al condominio Oceana Bal Harbour. Los propietarios de un apartamento en el edificio serán, además, proporcionalmente dueños de las obras, aumentando así considerablemente el valor de su propiedad. Éste es el segundo gran emprendimiento inmobiliario en Miami de Consultatio Real Estate, compañía también comandada por Eduardo Constantini.
La Ballerina sentada adornará la entrada del condominio Oceana en Bal Harbour, Florida.
Jeffrey Koons, el romántico provocador
Durante la presentación de Ballerina sentada en la explanada del MALBA, Jeffrey Koons expresó que «El acero inoxidable es uno de mis materiales favoritos por su durabilidad y su carácter fuerte. En mis esculturas, el material está pulido, lo que permite que el espectador se vea reflejado y haya una afirmación de su propio ser». El creativo considera que su ballerina es una moderna interpretación de la Venus de Boticcelli, que desde su belleza invita a la contemplación y lleva hacia una sensación de relajación y paz interior. Uno de los favoritos de Constantini, Koons es uno de los más importantes artistas contemporáneos y se caracteriza por ser innovador, apasionado, creativo y polémico.
Yoko Ono
La agenda del MALBA, uno de los museos más importantes de Argentina y de América latina, es variada e intensa. En el museo ya se percibe la expectativa previa a la próxima exhibición Dream Come True de Yoko Ono. Está previsto que el proyecto tenga su epicentro en las salas del MALBA, pero que también se extienda por la ciudad con diversas intervenciones en espacios públicos, medios de comunicación y con una intensa campaña en redes sociales. Yoko Ono ya invita desde el sitio del museo a las mujeres de América latina que hayan sufrido algún tipo de violencia por el simple hecho de ser mujeres a enviar una fotografía de sus ojos y un testimonio personal en forma anónima. La muestra se desarrollará en Buenos Aires entre el 24 de junio y el 31 de octubre del 2016. ■