Existe un lugar de ensueño en la Patagonia argentina. Un sitio que durante casi un siglo se mantuvo lejos de las miradas curiosas y donde apenas un puñado de elegidos pudo dejar su huella. Un valle con bosques de cipreses y coihues, colinas y praderas atravesadas por arroyos de cristalinas aguas de deshielo. Un valle pacífico, de perfumes intensos e infinitos colores donde se multiplican los salmones y las truchas. Un valle para explorar a lomos de un caballo, bajo el vuelo de los cóndores, o para calzar sus botas de trekking y descubrir la naturaleza patagónica en su máxima expresión. Ese lugar se denomina Estancia Arroyo Verde y está a apenas dos horas de vuelo desde Buenos Aires y a más de una hora y media de trayecto por la hermosa ruta que la une con la turística ciudad de San Carlos de Bariloche, en el suroeste de Argentina.
Estancia Arroyo Verde.
La antigua casa de verano
El sitio fue antiguamente el lugar de descanso veraniego de la tradicional familia Larivière que, con el tiempo, fue construyendo la casa principal y dependencias, respetando siempre el tradicional estilo arquitectónico de la región de edificaciones de madera local y piedra. La señora Meme Larivière recuerda que en aquellos veranos el valle se poblaba de voces y risas de familiares e invitados que llegaban a ese lugar sorprendente y casi mágico. Durante el día, disfrutaban de cabalgatas, paseos y pesca pródiga de salmones y truchas en sus arroyos, mientras que por las noches se entretenían con las deliciosas reuniones junto al fogón.
La estancia Arroyo Verde está enmarcada por los bellos paisajes de la Patagonia argentina.
La Patagonia en otoño.
Ese espíritu es el que se propuso mantener cuando en 1987 decidió abrir el rancho a selectos visitantes. La señora Larivière, junto a sus hijas Marina, María Luisa y Josefina, le dieron forma al actual Lodge Arroyo Verde. Entre sus destacados visitantes se encuentran el expresidente de Estados Unidos Dwight Eisenhower, el rey Leopoldo de Bélgica y la infanta Cristina de España. Renombrados pescadores de fama mundial han elogiado sus pesqueros, como Joe Brooks, Mel Krieger y Ernest Schwiebert, entre otros.
La familia Larivière.
Naturaleza patagónica y relax
Lodge Arroyo Verde está situado dentro del área natural protegida del Parque Nacional Nahuel Huapi, a los pies de la Cordillera de los Andes. Ese estatus le ha permitido mantener en notable estado de conservación a la subyugante naturaleza regional. Las actividades que se pueden llevar a cabo en Arroyo Verde son múltiples: observación de aves, cabalgatas, senderismo, excursiones fotográficas, pesca o, simplemente, caminar y relajarse en un ambiente natural y protegido. El alojamiento en la casa de campo ofrece vistas memorables desde sus ventanales. Allí, se luce la cálida hospitalidad de la familia Larivière, que comparte su vida diaria con los visitantes, haciendo las delicias de los agobiados viajeros que arriban al lugar.
Parque Nacional Nahuel Huapi.
Bello paisaje en la Patagonia.
El Traful: río sinónimo de pesca con mosca
El Traful es un típico río de montaña de aguas cristalinas y caudalosas, alternado de remansos, pozones y correderas. La tranquilidad del lugar, lejos de toda interferencia, lo transforma en uno de los de mayor preferencia de los pescadores. Sorprende en el Traful el intenso batallar del famoso salmón encerrado y las memorables contiendas que ofrecen las truchas arco iris y marrón. La pesca requiere autorización y sólo está habilitada con mosca y devolución obligatoria, lo que ayuda a mantener la importante población de peces en el río. Los promedios de capturas oscilan de entre 20 a 24 pulgadas (51-61 cm), aunque es común obtener ejemplares de entre 28 y 30 pulgadas (71-76 cm).
La pesca de mosca es una de las grandes atracciones en Arroyo Verde.
El salmón y la trucha abundan en el rio Traful.
El rio Traful es un paraíso para los pescadores.