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Para muchos de nosotros, la tarea de un arquitecto equivale a diseñar estructuras a un propósito específico, como casas, edificios de oficinas o aeropuertos. Sin embargo, algunos arquitectos prefieren enfoques más creativos, como contar una historia con las cosas que crean. Eso es lo que Luke Ogrydziak y Zoë Prillinger hicieron en su Shapeshifter House (que se podría traducir como “casa que cambia de forma”), una propiedad única y verdaderamente asombrosa, ubicada en las afueras de Reno, Nevada.
Patio de atrás de la casa. Foto: © Joe Fletcher 2018.
La pareja creativa, líderes de la firma Ogrydziak Prillinger Architects (OPA), utilizó estrategias narrativas para idear este proyecto.
Los clientes y propietarios de la casa Shapeshifter —dos coleccionistas de arte especializados en arte contemporáneo y arte del oeste de Estados Unidos— querían crear “una casa que reflejara su carácter contemporáneo y el paisaje del Oeste”.
Vista de la casa en medio del desierto. Foto: © Joe Fletcher
Según el sitio web de OPA, los arquitectos “reconfiguraron el lugar mediante anticlinales, sinclinales, dunas y concavidades, y poco a poco surgió la forma de la casa sobre el terreno”.
La casa «Shapeshifter» es única también en su interior, con una combinación osada de materias primas, enclaustradas entre las líneas angulares de la vivienda, especialmente los grandes ventanales que dejan pasar luz abundante.
Cocina y sala de estar de la casa. Foto: © Joe Fletcher
En cuanto a los ambientes, la planta baja está ocupada por una sala principal, comedor y una cocina abierta.
Se puede acceder al primer piso a través de una escalera, donde se encontrará un estudio y uno de los dormitorios. Una segunda escalera conduce al dormitorio principal, que incluye vestidor y baño privado. La pieza central de la suite, sin embargo, es el dormitorio, que ofrece vistas de Reno y el desierto circundante.
Detalles del diseño de las paredes. Foto: © Joe Fletcher
Arte en el desierto
Cada edificio contiene tanto las huellas de un arquitecto, lo que nos hace preguntarnos: “¿Cuál es la fuente de inspiración detrás del trabajo de cada arquitecto?”
Ogrydziak y Prillinger tenían como punto de partida un reto atractivo desafío: el desierto: ¿cómo construyes una casa que interactúe con un espacio normalmente asociado con la adversidad?
Dormitorio principal. Foto: © Joe Fletcher
“Históricamente, el desierto estadounidense se ha entendido como un lugar de carencias, vacío y remoto”, dicen los arquitectos en su sitio web. “Tachado como un páramo estéril, una suerte de lugar en ninguna parte, el desierto ha sido designado como el sitio perfecto para efectuar pruebas y experimentos de todo tipo: militar, científico y social. El desierto rara vez se ve por sí mismo. […] Agresivamente volátil, es una caja de arena que cambia de forma para adaptarse a la imaginación, un espacio de ambivalencia e incertidumbre”.
Uno de los dormitorios de visita. Foto: © Joe Fletcher
El nombre “Shapeshifter” no podría ser más apropiado tanto en las formas en que adopta la casa al caminar a su alrededor, como en la fuerte conexión de la zona con las tribus nativas de América y sus propias habilidades individuales para cambiar de forma.
Ogrydziak y Prillinger quisieron hacer algo distinto, nuevo y asombroso. Y eso fue exactamente lo que consiguieron. ■
